Quién sabe si dentro de poco no llegará la hora de lamentar no sólo el agua que se pierde en la red de distribución, sino también aquella que despilfarramos a diario, y que supone también fugas que los expertos cifran en más de dos mil hectómetros cúbicos por año.

Y es que los embalses extremeños no están para muchos derroches. La extrema sequía que ya va camino de cumplir su primer año ha dejado exhaustas las reservas, y siguen bajando.

Hace ahora justo un año, los datos del Ministerio de Medio Ambiente indicaban que los pantanos de la región guardaban en total algo más de 10.000 hectómetros cúbicos, es decir, estaban al 70% de su capacidad conjunta.

El Tajo, al 44%

Ahora la situación es mucho peor. Las reservas han caído en 16 puntos, y se sitúan en el 54%. Esto quiere decir que hay en reserva algo más de 7.700 hectómetros cúbicos, 2.300 menos que en agosto del 2004.

La situación es mala en ambas cuencas, Tajo y Guadiana, pero peor en la primera. De este modo, los embalses de la cuenca que riega la provincia cacereña cuentan con menos de 2.900 hectómetros cúbicos, con lo que no llegan ni al 45% de su capacidad. Hace doce meses guardaban casi 4.000 hectómetros cúbicos, es decir, sus reservas superiores en 17 puntos porcentuales.

Sólo en la última semana, estas presas han perdido medio centenar de hectómetros cúbicos, la mitad de ellos en el Gabriel y Galán.

En cuanto al Guadiana, las reservas son más elevadas, pero la situación también es muy preocupante. Según el último boletín hidrológico del ministerio, en conjunto los embalses extremeños de esta cuenca tienen 4.800 hectómetros cúbicos, es decir, que están a menos del 62% de su capacidad.

En agosto del 2004, las reservas superaban los 6.000 hectómetros cúbicos, 16 puntos porcentuales más que ahora. Además, en los últimos siete días el volumen de agua embalsada ha bajado en 80 hectómetros cúbicos.

Entre las grandes presas, Alcántara está al 45% y La Serena al 65%. Mientras, Cíjara está al 43% y Alange al 64%. Entre las de menor tamaño, Borbollón está al 29%, Jerte-Plasencia al 52%, Portaje al 39%, Salor al 28% y Piedra Aguda al 28,5%.

Hasta donde alcanzan las previsiones, no se auguran lluvias. Ya en febrero se dijo que la cuenca del Tajo tenía agua para un año y la del Guadiana para dos.