Esquerra Republicana logró anoche lo que se había propuesto durante la campaña: ocho diputados, la posibilidad de tener grupo parlamentario propio y ver al PP fuera del poder. Los republicanos triplicaron el número de votos de las pasadas legislativas, celebradas en el 2000: si entonces logró 190.292 votos, ayer sumó más de 600.000, y se convirtió en la cuarta fuerza política de España.

Además, por primera vez consigue diputados por las cuatro circunscripciones catalanas, aunque el porcentaje de votos obtenido en Barcelona, del 14%, le impide contar automáticamente con el grupo parlamentario propio, ya que para tenerlo es necesario lograr el 15% de votos en todas las circunscripciones en las que se presenta la formación. Pese a ello, los dirigentes del partido se mostraron confiados en que, como ya ha ocurrido antes, el Constitucional les dará la razón si recurren a él para que les deje formar grupo.

"SEGUNDA TRANSICION" El secretario general y candidato de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, compareció ante la militancia y los medios de comunicación minutos antes de las once de la noche, visiblemente satisfecho y arropado por la plana mayor del partido. Tras dedicar un recuerdo a las víctimas de los atentados de Madrid, a las que expresó su "solidaridad y fraternidad republicana", incidió en uno de los ejes que han articulado el discurso de ERC en la campaña: su papel "decisivo" para "un cambio de régimen en España".

Carod instó una vez más a José Luis Rodríguez Zapatero a "empezar una segunda transición democrática", con una política, dijo, basada en el respeto a las nacionalidades. "Nosotros estamos dispuestos a implicarnos. No rehuiremos ninguna responsabilidad", añadió. El líder republicano también quiso recalcar el crecimiento electoral de los tres partidos del Gobierno catalán, que han pasado de 19 escaños a 31, lo que consideró un refrendo popular al tripartito.

Carod compartió protagonismo con Joan Puigcercós, el hombre que ocupó el único escaño de ERC en la pasada legislatura y que repetirá en esta ocasión. Puigcercós dijo que su grupo trabajará para "desmontar la política involutiva de los ocho años de PP" y sobre todo para llevar a buen puerto el nuevo Estatuto catalán y el nuevo modelo de financiación de Cataluña.

Los resultados suponen la consolidación del crecimiento que ha mantenido ERC desde las generales del 2000.