--¿Habrá Womad en Cáceres este año?

--¡Ojalá! Pero ellos son los que no han entrado ni siquiera a negociar. Desde el Consorcio les hemos enviado otra carta hoy --por ayer-- para decirles que seguimos abiertos a negociar, con las condiciones evidentemente que ya les dijimos. Ha sido una extrañeza que corten sin entrar ni siquiera a negociar. No sabemos qué pasará, la decisión está en su patio.

--Ha mantenido una reunión de urgencia con la alcaldesa y el presidente de la diputación. ¿Para qué ese encuentro y qué posiciones han defendido cada uno?

--Las mismas posiciones. Se trataba de comunicarles el envío de esa carta a Womad e informarles de cómo va la situación. Si Womad dice no debemos estar preparados y es lo que estamos haciendo, trabajar para organizar un nuevo festival. Eso lo podemos hacer nosotros sin ningún miedo. Que se pierde un sello de identidad, es cierto. Nos molesta a todos, pero ese sello era cada vez menos identificativo.

--¿Está dispuesto el Consorcio a rebajar sus exigencias?

--Las mejoras no son extraordinarias. Hemos recopilado las reclamaciones de colectivos jóvenes y seguidores del Womad en tres años y se las hemos trasladado. Es dinero público y los gestores estamos para controlarlo, no para despilfarrarlo. ¿A qué renunciamos? Que no instalen equipos nuevos o que no pongan los logos del 2016. Tenemos que defender lo nuestro. Cada año decían que pensaban llevar a un grupo extremeño a otros festivales. Nunca sucedió. Ha sido un año, otro y otro, con engaños.

--¿Se agotarán todas las posibilidades para llegar a un acuerdo?

--Sí, de ahí la nueva carta. Pero ya no tenemos más recursos, nos pueden decir o no .

--La representante de Womad asegura que desde septiembre lleva solicitando una reunión.

--No es cierto. El director del Consorcio sí se puso en contacto con ella hace muchos meses para eso. Como no contestaba, se le remitió la carta para ver en qué nos poníamos de acuerdo. Pero ni eso nos han dejado. Es obvio que ellos ya no querían Cáceres.

--Womad opina lo contrario. Acusa al Consorcio de haber perdido la confianza en ellos y que no se les quiere en Cáceres.

--Eso lo dicen todos los años. Es una estrategia. Cáceres siempre ha querido el Womad. Se les dio una ciudad para el disfrute de ese Womad, se les quiso, se les abrió las puertas y nos fallaron. Las puertas siguen abiertas, pero traigame usted calidad.

--Womad también dice que ha tenido mucha paciencia.

--Tanta paciencia que les ha venido muy bien durante años. No terminaban de negociar hasta marzo o abril. Así no les quedaba más remedio a Saponi y al anterior consejero de consentir. Ya no podían dar marcha atrás. Así ha sido un año, otro y otro y siempre han fallado. Estrategias. Eso yo no lo he consentido. He aprendido de mis predecesores y de lo que ha pasado este tiempo.

--El ayuntamiento considera perjudicial para las aspiraciones del Cáceres 2016 la pérdida del sello internacional Womad. ¿Está de acuerdo? ¿Hay un peligro de que vaya a otra ciudad candidata?

--Puede que vaya a otra ciudad, aunque no es cierto que hayan contactado con Córdoba, pero no me preocupa. Europa no valora lo que nos traen hecho, sino lo que hace una ciudad porque es la presentación de su cultura. Vaya a la ciudad que vaya no puntúa, todo lo contrario. Con este festival alternativo tenemos incluso más oportunidad que con el propio Womad que nos vienen a organizar desde fuera.

--Desde algunos sectores se entiende que el Consorcio ha forzado el abandono de Womad, que es una muerte anunciada.

--Eso no lo provoca el consorcio, lo provoca Womad. Si va en deterioro cada año debe suponer que no podemos continuar, seríamos unos lelos. Son ellos los que quieren morir pero sacando y ya está bien de sacar.

--La Junta ha sido siempre el principal valedor de la continuidad del festival y, con Saponi en el Gobierno local, se culpaba al PP de querer acabar con esta cita musical.

--Eso no es cierto. Los que éramos partidarios del Womad seguimos reivindicando el festival pero no conformándonos. Yo no he roto, ha roto Womad, que quede muy claro, pero no voy a permitir que nos sigan tomando el pelo como no lo han tomado.

--El Womad es un festival maldito, no hay año que no genere polémica. ¿Por qué?

--Porque excepto en los primeros años nunca ha habido acuerdo, era una imposición. Womad es una empresa, no una ong, le encanta y provoca también esto, es una estrategia para que haya tensión en la ciudadanía y que los que administramos seamos cobardes y nos dobleguemos.

--Esa tensión ha alcanzado a las instituciones. El ayuntamiento ha anunciado que trabajará "con todas sus fuerzas" por mantener el Womad liderando la negociación. ¿Existen fisuras en el Consorcio?

--Para nada. Yo no tengo ningún problema y es una cuestión de criterios, pero creo que coincidimos en lo básico. No hay división de posturas puesto que no hemos roto ni la Junta ni el ayuntamiento. Lo que Carmen dice es que sigamos negociando y yo digo lo mismo. Solo soy realista, Womad ha dicho que se termina el festival y busco la alternativa.

--Otra lectura política es que subyace una lucha entre usted y Heras por la Alcaldía de Cáceres.

--Eso es sacar especulaciones de donde no existe ni la más mínima intención. Yo estoy contentísima porque estoy haciendo lo que me gusta. ¿Para qué quiero yo ser otra cosa?

--¿Entonces no corren peligro las relaciones entre la alcaldesa y la consejera de Cultura?

--En cualquier caso, no sería con la consejera de Cultura, sino con el Gobierno autonómico porque el Gobierno entero opina lo mismo que yo y lo he consultado. No hay roce ni malestar. La única diferencia es que cuando existe un Consorcio, hay una voz, que es su presidenta, como el Consorcio del 2016 que preside Carmen. Yo siempre voy a respetar su voz.

--¿Está ultimado el festival alternativo al Womad?

--Sí, en 5 o 6 días se anunciarán los artistas contactados y el nombre se elegirá por consulta ciudadana, pero tenemos que esperar la respuesta de Womad. Me da pena que se vaya, pero podemos demostrar que lo podemos hacer muy bien.