María Francisca Rosa agradeció en su intervención el que se reconociese la labor "callada y silenciosa" desarrollada por la Congregación de las Hermanas de la Cruz". Esta congregación cuenta con 53 casas que se distribuyen por España, Italia e Hispanoamérica, cuatro de ellas en Extremadura (las de Villafranca de los Barros, Zafra, Oliva de la Frontera y Jerez de los Caballeros).

Entre las tareas que realizan estas hermanas diariamente están la asistencia a enfermos y ancianos en sus propios domicilios o la asistencia de ancianos en las residencias de la compañía. Además, cuentan con centros de educación infantil y primaria. "Me hace muy feliz recoger esta medalla en nombre de estas grandes mujeres que sin duda no buscan el reconocimiento público", señaló María Francisca Rosa.