No todo el mundo quiere dejar de fumar. En Extremadura las autoridades sanitarias calculan que sólo uno de cada diez fumadores está dispuesto a acabar con su adicción. Para ellos, los tratamientos serán gratuitos.

El Ministerio de Sanidad va a poner en marcha un proyecto piloto para ofrecer tratamientos gratuitos a quienes deseen abandonar esta práctica. Las líneas generales del plan, que llega con tres años de retraso y críticas por su demora, serán consensuadas entre el director general de Salud Pública, las comunidades autónomas y el Plan Nacional de Drogas, aunque falta por concretar los porcentajes por parte de las comunidades autónomas interesadas.

No obstante, esta iniciativa supondrá que el ministerio incremente su asignación a Extremadura por las transferencias sanitarias en una cifra de unos 4 millones de euros anuales.

El Ministerio de Sanidad propone un modelo similar al que aprobó el pasado mes de junio Navarra, que financia estas terapias (parches y pastillas) como cualquier otro fármaco. Las terapias, que tendrán un seguimiento especial, serán prescritas por las unidades acreditadas y los médicos de familia.

Programa voluntario

Este programa será voluntario, ya que algunos opinan que el sistema sanitario público no debería pagar estas terapias debido a que su coste es el equivalente al gasto en tabaco durante tres meses de un fumador. Se calcula que el tratamiento tiene un coste de 305 euros (unas 50.000 pesetas) por paciente.

Sanidad ha calculado, teniendo en cuenta la experiencia del Reino Unido y de otros países, que en España sólo pedirían ayuda el primer año para deshabituarse y serían susceptibles de ser tratadas con fármacos unas 200.000 personas, menos del 2% de los fumadores. Los expertos estiman que 9.000 personas intentan dejar de fumar cada día en España y apenas 300 lo consiguen finalmente. Sólo un 60% de los fumadores puede ser sometido a terapias sustitutivas. El Bupropion, que reduce la ansiedad de fumar, está contraindicado en más de un 20% de personas con enfermedades.

Para el secretario del Plan Regional sobre Drogas de Extremadura, Carlos Martín, la evidencia científica indica que el tratamiento más efectivo es utilizar a la vez medios como la asistencia psicológica, los fármacos --no en todos los casos--, la autoayuda y los consejos médicos, con lo que se consigue una eficacia de entre el 35% y el 45%, según las mediciones realizadas en pacientes que superan el año de abstinencia.

Curiosidades

Otro de los aspectos importantes del proyecto del Ministerio de Sanidad es que la iniciativa se desarrollaría desde la Atención Primaria, en los propios centros de salud, en los que se llevaría a cabo la evaluación del paciente, ya que hasta ahora los tratamientos se realizan en los centros de drogodependencia (Cedex). Esto permitirá atender a un mayor número de pacientes, ya que, por la limitación de los recursos, ahora sólo se pueden atender los más graves.

Los especialistas coinciden en señalar que en cualquiera de los tratamientos que se elijan lo más importante para tener éxito es que el fumador tenga una verdadera voluntad de superar su adicción al tabaco.