El informe de UPA sobre la agricultura española confirma algo que ya se daba por hecho: que Extremadura es una potencia agraria en toda regla. Al menos, así los revelan los datos hechos públicos ayer en Mérida por esta organización, que indican que la región está entre las zonas más productores de hasta a 19 de los 60 principales sectores agroganaderos.

Esta cifra sólo la superan Andalucía (una potencia en hasta 33 sectores), Castilla-La Mancha (con 26) y Castilla y León (con 20). Por detrás de la región se sitúan comunidades que históricamente también habían sido grandes potencias en la agroganadería, tales como la Comunidad Valenciana, Murcia y Cataluña.

Además, en cuatro de los sectores Extremadura es la mayor productora nacional. Esto ocurre, concretamente, en el maíz (la comunidad copa el 16% de la producción nacional), el tomate (el 40%), la soja (el 70%) y el tabaco.

Dominio abrumador

Este último caso es el más especial, puesto que hay muy pocos casos en los que, como ocurre aquí, una comunidad domina el sector de forma tan abrumadora, puesto que la región extremeña copa ya el 96% de la producción nacional. Esto sucede, por ejemplo, con Andalucía con el algodón (97%) y las fresas (95%), con Cataluña con las avellanas (97%) y, por supuesto, con los plátanos y Canarias (99%).

Pero además de ocupar el primer puesto en estos cuatro sectores, Extremadura es una potencia en otros 15 más. Algunos son muy conocidos, como ocurre con el trigo duro, el arroz (sólo Andalucía produce más que la región), la uva para vino, el aceite de oliva, los espárragos, las cerezas y ciruelas, la miel y las carnes de vacuno y ovino (en el porcino está algo por debajo de Cataluña, Aragón y Castilla y León).

Sin embargo, mucha gente no sabe, por ejemplo, que Extremadura produce el 70% de la soja que hay en toda España o que uno de cada tres kilos de garbanzos españoles procede de suelo extremeño. A esto hay que sumar que la región es la tercera mayor productora de algodón.

Cultivos desconocidos

Más extraño aún suena, para los menos conocedores del mundo agrario, que la comunidad autónoma es una de las pocas donde se cultiva el sorgo, una planta que crece en cañas de entre dos y tres metros de altura y que se utiliza, sobre todo, como pasto para las vacas y otros animales.

También se planta en Extremadura el 20% del triticale que crece en España. Se trata de un cruce entre cebada y centeno, resistente a las inclemencias meteorológicas y que en los últimos años está ganando terreno gracias a su inusual resistencia.