El SES prevé evitar 40.000 casos de gripe en Extremadura con la campaña de vacunación que empieza pasado mañana, 13 de octubre, y que se prolongará hasta el 30 de diciembre. La Junta ha adquirido 218.000 dosis, 52.000 menos que hace un año pero suficientes, asegura, para cubrir a toda la población de riesgo: mayores de 60 años, embarazadas, personas ingresadas en instituciones, enfermos crónicos y aquellas que prestan servicios comunitarios esenciales, tales como policías, bomberos, protección civil y docentes. Además, también se vacunará contra el neumococo a los mayores de 65 años que no hayan vacunado. Del total de vacunas, 93.000 tienen una mayor inmunidad y con ellas se vacunará a personas mayores de 75 años y a quienes estén ingresadas en residencias. El SES quiere "que se agoten las vacunas, vacunar a toda la población diana, porque el año pasado sobraron vacunas y porque desde la campaña 2003-2004 se ha pasado de una cobertura del 82% al 69% la última campaña", según indicó ayer el director general de Salud Pública, Juan Luis Cordero, que explicó la campaña junto a la consejera de Salud, Jerónima Sayagués; y el director gerente del SES, Albino Navarro.
En ese sentido, el SES insta a vacunarse. "Queremos que se agoten las vacunas, que haya vacunas para todos, porque el año pasado sobraron y por eso ahora compramos menos, pero nos hemos asegurado una recompra en caso de necesidad", señaló Cordero. En cualquier caso, los objetivos para la inminente campaña son vacunar al menos al 80% de la población a partir de 60 años; y disminuir la incidencia de la enfermedad, los ingresos hospitalarios y la mortalidad (el pasado año falleció una persona por gripe, frente a las 15 que murieron en el 2009).
Quienes estén dentro de esa población diana y quieran vacunarse deben personarse en su centro de salud o pedir cita previa. Para ello, la campaña se realizará en los 107 centros de salud y 413 consultorios locales de Extremadura.
El coste de evitar esos 40.000 casos a través de la vacunación es de 900.000 euros, por lo que evitar un caso le cuesta al SES en torno a 21 euros, mientras que el tratamiento oscila entre 80 y 120 euros, argumentó la consejera. Sayagués destacó el procedimiento de adquisición de estas vacunas, mediante una compra centralizada promovida por el Ministerio de Sanidad, a la que se han unido las comunidades autónomas de Aragón, Cantabria, Castilla y León, Madrid y la Comunidad Valenciana, y que, según dijo, permite un ahorro en los costes.
DOS VACUNAS
Las cepas que ha adquirido el SES son las mismas que en la campaña pasada, porque epidemiológicamente no ha habido cambios. Se trata de las vacunas antigripales Gripavac (protege frente a las tres cepas del virus contenido en la vacuna después de unas 2 a 3 semanas de la inyección) e Intanza (es por vía intradérmica, permite un acceso directo y efectivo al sistema inmune a través de la dermis --capa media de la piel-- y tiene un sistema de inyección precargado y listo para su uso, con una aguja muy corta, que libera la dosis precisa y fiable dentro de la dermis).
A este respecto, las autoridades sanitarias extremeñas insisten en que las vacunas son "seguras" y reiteran la necesidad de vacunarse porque sus efectos duran entre 6 y 12 meses.
El año pasado se detectaron 34.000 casos de gripe y una muerte por esta enfermedad en Extremadura, frente a las 15 del 2009. La cobertura fue del 69,4% de la población de riesgo, las tercera más elevada del país tras Castilla y León y La Rioja, pero lejos del 82% alcanzado en el año 2003, una bajada que Cordero atribuye a una cierta relajación ciudadana, incrementada tras comprobarse la poca incidencia de la gripe A, y a algunas "falsas complicaciones" con la vacuna del virus del papiloma humano.
En todo caso, los datos del SES reflejan que en las temporadas anterior a la aplicación de los programas de vacunación masiva frente a la gripe, en Extremadura se daban alrededor de 80.000 casos por temporada, mientras que después de la puesta en marcha de estas medidas la media de casos es de alrededor de 40.000.
