Extremadura vivió ayer una jornada especialmente trágica a causa de la ola de calor, ya que se desataron hasta siete incendios, la mayoría provocados por la caída de rayos, que a última hora de la tarde llevaban arrasadas más de 3.000 hectáreas. Las llamas afectaron a parajes situados en los términos municipales de Jerez de los Caballeros, Valencia de Alcántara, Carmonita, La Codosera, Mirabel, Fuente del Maestre y Palomas.

El más importante por sus dimensiones fue el que afectó a Jerez, que se inició hacia las seis y media de la tarde del viernes, y ya ha asolado 1.500 hectáreas de encinar y monte bajo, lo que acarreará importantes pérdidas económicas aún por cuantificar.

Pese a que en la mañana de ayer se dió por controlado, al mediodía el calor y el viento reavivaron las llamas y el incendio volvió a reactivarse, según informó Ana Holguín.

En La Rabaza, aldea próxima a La Codosera y pegada a la frontera portuguesa, unos 300 vecinos denunciaron la pasividad de los responsables de la lucha contra el fuego, ya que no se habían desplazado efectivos al lugar pese a que desde el viernes hay activo un incendio con un frente de más de seis kilómetros y que se aproxima a sus viviendas.

800 HECTAREAS EN VALENCIA

Casi al mismo tiempo que surgían los focos de Jerez y La Rabaza, un rayo provocaba otro incendio en el paraje de La Platera, en Valencia de Alcántara, que arrasó más de 800 hectáreas de monte bajo y eucaliptos antes de que los efectivos del Infoex, apoyados por cinco helicópteros lograran controlarlo, informó Eustasio López.

Cerca de Mérida, en Carmonita, un fuego originado a las cuatro de la tarde a casi 20 kilómetros, a la altura de Casas de Don Antonio, avanzó por la sierra hasta las inmediaciones del balneario Fuentes del Trampal, de donde fueron evacuadas 80 personas, al llegar las llamas a pocos metros de las instalaciones.

El fuego no había sido aún controlado y se desconoce la extensión calcinada.