Contrariamente a lo que se pretendía, la imposición de la tarifa por minutos --y no por horas o fracciones, como ocurría hasta hace unos meses-- en los parkings de uso público ha terminado perjudicando a los usuarios, que ahora pagan hasta tres veces más por dejar su vehículo en una de estas plazas de aparcamiento. El incremento de tarifas ha sido generalizado, y sólo se ha salvado el tramo de menor tiempo, es decir, quienes aparquen menos de una hora pagan precios iguales o inferiores (con la única excepción del parking Fernández López, en Mérida) a los de antes. Sin embargo, para estancias medias o prolongadas --entre tres y ocho horas-- los precios se han disparado.

La parte positiva es que, después de no poca resistencia, los propietarios de los aparcamientos de uso público han terminado acatando la normativa, y la tarifa por tiempo real está prácticamente generalizada, con alguna excepción menor, como es el caso de parkings que cobran por fracciones de tres o incluso dos minutos.

En las subidas, los aparcamientos de Mérida se llevan la palma. Todos han subido, pero los de la firma Cysex han triplicado su precio. Así, en el de Atarazanas, aparcar 45 minutos cuesta la mitad que antes --60 céntimos-- pero si el coche permanece tres horas se duplica el coste anterior, hasta llegar a los 2,4 euros. Mientras, dejarlo durante toda la mañana (de 8 a 15 horas) sale por 8,5 euros, un 354% más caro que antes de la tarifa por minutos.

En cuanto al de la Politécnica, de la misma empresa, la situación es similar. Dejar el coche tres cuartos de hora cuesta lo mismo que antes, pero si se permanece tres horas el precio sube un 228% respecto al anterior, y si se está ocho horas habrá que pagar un 300% más.

Finalmente, en el de Fernández López el incremento de precios varía entre el 12% y el 30%, según el tiempo que se esté, y es de los pocos que ´penaliza´ las estancias más cortas, ya que los precios por minuto van bajando mientras más tiempo permanezca el coche aparcado. Caso singular lo constituye el parking que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) gestiona. Aquí los precios han bajado, excepto en el tramo de menor duración de estacionamiento.

SUBIDAS ANTICIPADAS Por lo que se refiere a Cáceres, el aparcamiento de Obispo Galarza mantiene la misma tónica de subidas. Así, aparcar durante 45 minutos cuesta lo mismo que antes, pero si la estancia se prolonga hasta tres horas habrá que pagar un 30% más que cuando se tarifaba por horas o fracción.

Si el estacionamiento es deocho horas el incremento rondael 60%. En cuanto al de Cánovas,mantiene los precios, pero conla salvedad de que se incrementaronel pasado año un 30%.El mismo caso se da en Badajozen los parkings de San Antón(subió el pasado año un 56%) ySan María (los precios se habíanincrementado ya un 25%).En cuanto al de Menacho, enla misma ciudad, el comportamientoes el más generalizado:se favorece la corta estancia conuna leve bajada de precios, perose penaliza a quienes aparquendurante tres horas (20% más) y aquienes estén durante ocho horas(28% más que antes).Finalmente, en Plasencia, elparking de Puerta de Talaveramantiene el precio, pero, comoen casos anteriores, ya había subidolos precios anteriormente,en este caso un 30%.