Montse Cortiñas, miembro de la ejecutiva federal de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), pidió ayer a la Administración ayudas directas para los agricultores y ganaderos, cuya actividad se ha visto afectada por los incendios. "Han perdido todo lo que tienen. La actividad económica se ha reducido a cenizas y necesitan un apoyo para continuar". Además, deseó que lo que queda de verano sea "más tranquilo porque han empezado con muchísima virulencia los incendios forestales".

En este sentido, afirmó que incendios forestales como los últimos ocurridos en Extremadura y Guadalajara afectan "de forma terrible" a los trabajadores del campo, hasta el punto de que algunos "han perdido su cosecha pero desde luego lo que han perdido es su pueblo".

De esta manera, anunció a Europa Press que aunque todavía no se puede hacer una valoración económica, de lo que sí se tiene certeza es de que nos encontramos ante "situaciones personales muy complicadas para agricultores y ganaderos".

Así, recalcó que los incendios les afectan "de forma dramática" dado que, "si ya es horrible que se queme el monte, ellos pierden también sus explotaciones".