Al concretar, Rodríguez, que no va a volver, pero que como nos ha engañado tantas veces, como nos ha avisado que los primeros brotes verdes se veían ahora y sigue yerma la tierra, que en este mes de marzo ya veríamos el aumento de prestaciones laborales y han caído, por desgracia 34.000 personas más al paro, y augurar Salgado que el paro va a aumentar, ¿qué podemos esperar en este año que le queda a Rodríguez? Se han desdicho -desdecido que diría Patín- tantas y tantas veces, han errado en sus previsiones tantas y tantas veces, que si antes no se les creía, ahora, en lo que nos queda por aguantarles, ya es risa malsana de incredulidad la que esbozamos. Es una auténtica vergüenza nacional lo que se nos está haciendo por parte de este gobierno socialista. Si han vulnerado el artículo 50 de la Carta Magna, riéndose de ella, congelando las pensiones, si se permite que los ex-ministros cobren el 80% de sus salarios, computándose con los salarios que cobran en las empresas en las que se les ha colocado más que bien, si se admite que Chaves, con dinero público, presuntamente subvencionó a la empresa en donde trabaja -o trabajaba, no lo sé- su hija; si Bono, ese personaje de sonrisa falsa, de doble moral, ya que por una parte dice ser católico y por otra vota a favor del aborto (no se puede servir a dos señores, no se puede encender una vela a Dios y otra al diablo), presuntamente no ha justificado plenamente, el incremento descomunal de su patrimonio, etc., etc. ¿Qué podemos esperar? ¿Más de lo mismo? Y, mientras, los de la ceja, los sindicatos y las ongs, que han recibido y reciben dinero a mansalva por parte del gobierno, les apoyen incondicionalmente, y nosotros nos estemos quietecitos en casa, veremos muchas más cosas inesperadas. Ahora bien, a partir de 2012, si Rodríguez mantiene su palabra de no presentarse -que queda por ver si no se vuelve atrás como tantas veces lo ha hecho-, ¿qué harán los de la ceja? ¿En donde se colocarán el dedo?