En el curso 2008/2009 solicité beca para ayuda de psicoterapeuta para mi hija. Ayuda que viene contemplada en las becas para Alumnado con Necesidades Educativas Específicas. Todos y cada uno de los requisitos se cumplían y cumplen al día de hoy escrupulosamente.La absurda puesta en escena llevada hasta último término por el estamento escolar, fue considerar que como en el colegio existía PT y personal de AL, según me comunicaba Cambero Martínez, jefe de S. de Becas, los servicios estaban cubiertos, cuando ni mi hija ni yo jamás interactuamos con ellos. De hecho el colegio y el entramado educativo seguía basándose en el informe falseado del EOEP de Almendralejo, en el que dado que ellos no habían detectado tal necesidad de apoyo no se daba y asunto resuelto, puesto que debía ser muy dañino para sus orgullosas ignorancias el que un simple padre les estuviese indicando por activa y por pasiva el trastorno que padecía mi hija. Con ello indirectamente desdecían a los especialistas médicos incluso menospreciando ese 33 de discapacidad que por sí sola ya era suficiente para obtener dicha ayuda psicoterapéutica. En el 2009/2010 la propuesta de denegación fue basarse en que estos servicios estaban cubiertos por el sistema educativo extremeño, puesto que yo solicitaba esas ayudas a través del Ministerio de Educación y Ciencia. Este último intento, en el 2010/2011 tuvo como obstáculo y principal y absurdo argumento, el que faltaba el informe psicopedagógico exigencia curiosamente que debería ser proporcionada por ese departamento, pero en definitiva con esa obstrucción se justificaban los medios para conseguir la finalidad en este caso negar sistemáticamente estas subvenciones a una muy desfavorecida y marginada alumna. Se habían cumplido los objetivos y mi hija no tendría una vez más ayuda alguna. Se mantenía así, el espíritu represivo de quien administra los recursos públicos, solo que esa táctica tan frecuentemente usada en los años de nuestra vergonzosa posguerra no daba sus frutos con este que escribe. Como en anteriores ocasiones intenté reclamar esa falta atroz de injusta medida. En primer lugar reclamando, tras afirmárseme que me habían informado por escrito de ese supuesto requisito y posteriormente proporcionando, en este caso, el correspondiente informe tras solicitarlo al colegio, en tiempo y forma. Finalmente una carta llegada por el Delegado Provincial de Educación, Enrique Pérez Pérez, me comunicaba que la beca no se concedía porque había pasado el plazo para entregar el susodicho informe, lo cual es nuevamente falso. Aun a sabiendas de que el mísero, cínico y despótico Sistema Educativo extremeño absurdamente una vez más mentía, refugiándose en falsos hechos, he decidido finalmente no reclamar este derecho, sino denunciar públicamente estas vergonzosas actitudes de pandilleros camorristas, cobardes y pendencieros. No con un padre, sino con quien sufrirá las macabras medidas de estos sujetos en este caso mi hija, que es quien viene pagando la factura de tanto trepa palmero y corporativista piara de indecentes y apologéticos funcionariados, pues mi hija, ni ha podido ni podrá beneficiarse de una ayuda psicológica como entienden que necesita diversos especialistas médicos y psicólogos. Unida a esta sistemática negativa, a mi hija mayor y ya definitivamente exiliada de cualquier colegio rancio de los que tanto han atentado contra sus derechos, también se le ha negado la ayuda de profesorado en casa por llevar una vez más un tiempo excesivo sin poder acudir a clase, dado el minante y desolador ambiente escolar donde no ha sido infrecuente en los tres colegios por los que ha pasado ser tildada de mentirosa, boba, tonta, zumbada y mucho más, amén del desprestigio, exclusión, burlas y marginaciones múltiples y donde la opinión de la niña siempre ha sido desechada y nada tomada en cuenta por la sistemática banalización del profesorado que en cada curso ha ido teniendo.Por supuesto a mi hijo pequeño tampoco se le ha otorgado la ayuda de libros correspondientes que también he reclamado...