Espera a ver si me entero bien. Resulta que UGT de Andalucía se ha financiado presuntamente de manera ilegal inflando facturas para así recibir más subvenciones. Al parecer hay unas facturas irregulares con el fin de justificar dinero de formación utilizado en gastos de organización sindical, ¿no es así?

Sinceramente, me quedo aturdida. Resulta que si es verdad, miles de trabajadores han confiado plenamente en esta unión sindical mientras que ellos se regían por el lema “ancha es Castilla”.

Resulta que toda la demagogia barata utilizada en los discursos no es más que política -aunque esto no lo pienso de ahora, ya que todos sabemos que apoya más la vía del PSOE-. ¿Y yo que aún pensaba que todavía se podrían defender los derechos de los trabajadores a través de los sindicatos -como en la época de los movimientos obreros-y ellos posiblemente tengan cuentas ocultas?. Ingenua de mi. Según fuentes de El País, las diligencias previas abiertas apuntan a posibles delitos de malversación de caudales públicos, falsedad documental y apropiación indebida.

Y de momento se tienen datos y números de gastos en la feria de Sevilla en 2010, un convite para 1.600 mujeres en Andalucía el Día de la Mujer y 124.000 euros gracias al falseamiento de facturas en 2012. Esto, sin tirar de la cuerda -que espero que no haya más sorpresas-. Según datos del diario que ha abierto la investigación, El Mundo, el pasado agosto, los líderes de UGT admitieron posibles “errores” en la facturación de servicios con cargo a los programas de formación subvencionados y crearon un “fondo notarial” de 115.000 euros para devolver el dinero. Eso si no hacen como el dinero que supuestamente se iba a recaudar del fraude fiscal y anticorrupción. Al final todo acabará en las mismas manos: entre ellos y ellos.

Por el momento, hay tres frentes de investigación: la judicial, la interna del propio sindicato y la de la Junta de Andalucía, como víctima de la supuesta estafa. Lo normal en las investigaciones es que como sabemos, cada cual “barra para su casa”, y es por eso que el PP achaca a la Junta de Andalucía como responsable de controlar los fondos públicos que concede.

Pero hombre…¿que vais a hablar vosotros de financiación ilegal?, ¿todavía no habéis respondido por el Caso Bárcenas y pretendéis dar lecciones sobre transparencia y compromiso con los ciudadanos?. Sólo pensad: “no hay más tonto que el que no quiere ver”. Pues parece que en Andalucía los ERE y ahora el caso de las facturas de formación de UGT no dejan indiferente a la justicia y a la ciudadanía, pero sobre todo al PP, un gran argumento utilizado reiteradamente en los mítines.

Aunque no ha habido información continuada en los medios durante varios días, sigue siendo una investigación por presunta irregularidad financiera, algo a lo que estamos ya muy a acostumbrados a oír. A ver si esta vez se hacen las cosas bien y es verdad que el sindicato devuelve lo que no le pertenece, porque a este paso no se descartaría el nombre de: Unión General de Timadores.