Ha tardado tres décadas pero Paul McCartney lo ha conseguido: Let it Be , el último disco de The Beatles, está disponible sin orquestaciones ni coros, en una versión más rockera que remite a los orígenes de la banda. Let it Be... Naked (Desnudo) salió a la venta el pasado lunes en todo el mundo como símbolo de una victoria postrera de McCartney sobre John Lennon.

Desde que en 1970 fue publicado --separado ya el Cuarteto de Liverpool-- sir Paul McCartney ha luchado para que se devolviese al disco su sonido original y natural, algo parecido a como The Beatles sonaban en directo.

LA OBSESION DE McCARTNEY

El Naked es fruto de esa obsesión de McCartney, de la que disentía Lennon, al que le encantaron las orquestaciones, coros y efectos introducidos por el productor Phil Spector, villano para unos y genio para otros.

Para que salga a la venta con una carátula que reproduce la foto original, ha sido preciso contar con el apoyo del otro Beatle vivo, Ringo Starr, y el beneplácito de Yoko Ono, la viuda de Lennon a quien muchos consideran culpable de la separación del grupo. Según Starr, George Harrison dio antes de morir su autorización para que naciese esta nueva versión.

El disco ha sido remasterizado con tecnología digital para despojarlo de las orquestaciones introducidas por Spector, lo que permite escuchar sin efectos temas como The Long and Winding Road o el propio Let it Be .

La nueva versión ha sido criticada por los que creen que lo que ha permitido la compañía Apple Corps -encargada de velar por los derechos de las canciones de The Beatles- es crear un disco distinto al que firmó el Cuarteto de Liverpool.

Pero lo cierto es que la historia del último álbum fue tumultuosa desde su comienzo pues ni siquiera fue ideado como un disco de despedida.

Let it Be fue grabado antes de Abbey Road , pero difundido más tarde a causa de varios desacuerdos que condujeron a la separación del grupo en 1970.

Las once canciones que integran ahora Let it Be...Naked fueron grabadas en 1969 para un álbum que se iba a llamar Get Back y con el que los Beatles pretendían reafirmar el regreso a sus orígenes musicales. Pero estaban ya en proceso de separación y el proyecto de disco fue abandonado hasta que, un año después, el productor Spector convirtió cientos de horas de música en Let it Be .

La nueva versión está además acompañada por un segundo CD que contiene 23 minutos de The Beatles hablando y tocando sus canciones mientras ensayan en enero de 1969, toda una joya para los "beatlemaníacos".

Y en su portada aparecen, ante un fondo gris, las fotos de cuatro melenudos que en 1963 alcanzaron el éxito con Love me Do y que desde los estudios de Abbey Road cambiaron la historia de la música del siglo XX.