Las universidades españolas esperan sortear los efectos que la crisis económica pueda tener en los presupuestos que las respectivas comunidades autónomas les asignan ya que es ésta su principal fuente de financiación. En Madrid ya se ha desatado la polémica ya que el Gobierno de Esperanza Aguirre destinará 1.121 millones, un 4,3% menos según calculan las universidades afectadas, a la enseñanza superior. Principalmente, esa partida irá destinada a pagar las nóminas y otros gastos de funcionamiento.
Los rectores afectados, reunidos en la Conferencia de Rectores de las Universidades Madrileñas (Cruma), reclaman una reunión con la presidenta de la Comunidad de Madrid para que se llegue a un compromiso por escrito sobre financiación. En esta línea, Carlos Berzosa, el rector de la Universidad Complutense de Madrid --la presencial con más alumnos de España-- asegura que la UCM tiene unas deudas que superan los 20 millones.
Por su parte, El Gobierno de Madrid asegura que colaborará con las universidades públicas madrileñas en el caso de que éstas tengan que justificar algunos retrasos en los pagos de las infraestructuras que tienen en este momento en marcha debido a la "bajada sustancial" recogida en esta partida para los presupuestos de 2009.
