El exministro de Justicia y exfiscal del Tribunal Supremo, Mariano Fernández Bermejo, señaló ayer que organizaciones como la FIFA, la ATP o el movimiento olímpico internacional se han convertido en un «verdadero Estado» y sobreviven «al margen» de la regulación de los países.

Fernández Bermejo, que impartió una lección magistral en la Facultad de Derecho de Cáceres, con motivo del patrón del centro, San Raimundo de Peñafort, titulada ‘Al tercer córner, penalti’, señaló que estas entidades actúan con sus propias reglas, intentándolas imponer en ocasiones por encima de las de los estados, informa Efe.

Por ello, abogó por dar una mejor formación jurídica a los árbitros y organizaciones deportivas, implicando a las universidades públicas frente a la cesión de competencias y soberanía por parte de los estados en favor de estos entes.

«Es un fenómeno de globalización que no tiene una respuesta en las universidades, sobre todo en las facultades de Derecho, que deberían formar, como ocurre en el ámbito privado, a la gente que se ocupa de esas estructuras, a los técnicos, y sobre todo a los jueces, pues el árbitro es sobre todo un juez», dijo Fernández.

En su conferencia disertó sobre la necesidad de dar formación jurídica ante la importancia de deportes como el fútbol que mueven millones de euros y muchas emociones a nivel mundial.

Como ejemplo puso a la FIFA, un «entramado» para «eludir» con su autonomía el resto de poderes constituidos, «con un poder legislativo supremo, el congreso, un ejecutivo y un judicial», en lo que es «un verdadero estado que sobrevuela el poder de los estados».

En su opinión, los estatutos de la FIFA «chocan» con la Constitución, que reconoce el derecho a la tutela judicial efectiva.

Estas organizaciones viven «al margen del resto del mundo y controlando sus propios problemas», sentenció Fernández Bermejo, profesor de Derecho Penal en la Universidad de Extremadura de 1977 a 1980.

A pesar de ello, recordó que se dan casos como el del exjugador belga Jean-Marc Bosman, quien acabó con el cupo de extranjeros comunitarios en el fútbol europeo al recurrir ante la Justicia el derecho de retención de su club por violar la libre circulación de trabajadores en Europa.

Para este magistrado, es importante la formación de los jueces de estos organismos puesto que un equipo pierda la final de la Champions por un penalti injusto puede significar «por efecto dominó» la pérdida de cientos de millones de euros o la desaparición de un club.

Y es que los organismos dan «autoridad total», según expuso, al árbitro, con decisiones inmediatamente ejecutivas e inapelables, solo pudiendo recurrir las sanciones derivadas de estas.

Además, a su juicio, las normas del fútbol introducidas por el VAR están caracterizadas por un «lenguaje oscuro», fruto de no haber leído sus promulgadores ningún texto de derecho «en su vida», y existe una «ausencia» de explicación de conceptos.

En este sentido, afirmó que el protocolo del VAR alude a que entrará a juzgar un error «claro, obvio y manifiesto», términos sinónimos, y, por otro lado existen traducciones de la norma en inglés incorrectas como decir voluntario a algo deliberado o intencional.