Es la agridulce y pintoresca historia de Leandro y Priscila. Dos excéntricas personalidades que coinciden una madrugada en la plaza K-Matute. Allí, pese a sus miedos y complejos, inseguridades, perezas y vergüenzas, conseguirán por ¬n brillar de igual modo que brillan las luciérnagas. A pesar de los días oscuros, la luz existe; existe al final del túnel e incluso dentro de nosotros y por tanto, dentro de otros. Solo hay que con¬fiar. Querer es poder.

In-comunicaciones es un cambio en nuestra rutina que apuesta y confía en el lado más poético, sensible y bello de la vida misma. Es un abrirse y permitirse desde la naturalidad, la espontaneidad, la sonrisa y la paciencia.