Ya hace unos meses que Orestes y Rafa se despidieron de Pasapalabra y por el programa han pasado numerosos concursantes que, aunque no han dejado el mismo poso, sí calan entre los telespectadores.

Como dignos herederos de Orestes y Rafa, Fer y Moisés luchan amigablemente por conseguir el rosco del programa más popular de la televisión, que ya se acerca a los 600.000 euros. Cada uno muestra al espectador sus peculiares, sus estilos y sus caracteres; y la audiencia lo agradece y les coge cariño.

De hecho, en estas semanas, ya hemos vivido momentos sublimes y duelos singulares que dejan retazos de las estrategias de cada concursante. Pero es en  la prueba final, el Rosco de Pasapalabra, en la que se plasma las peculiaridades de Fer y Moisés.

Mucho dinero en juego

Como ya sabemos, Pasapalabra se erige como el programa de la televisión española que más dinero ha repartido (Eduardo Benito era el concursante que había ganado el mayor bote de la historia del programa, de 2.190.000 euros, hasta que irrumpió la victoria de Rafa frente a Orestes, con un premio de 2.272.000 millones de euros). Al mismo tiempo, en el año 2010 este concurso ganó el Premio Especial del Jurado en los Premios Ondas 2010 por sus 10 años de éxito en televisión.

Además, también es uno de los programas más vistos de la televisión española y el rey de la franja vespertina. Y este éxito se basa en la empatía de los telespectadores con los concursantes. Y eso parece que puede empezar a ocurrir con Fer y Moisés.

Sorpresa en Pasapalabra: Así es la novedosa técnica de Fer para ganar el rosco que dejó a Roberto Leal boquiabierto EL PERIÓDICO

El duelo Fer vs. Moisés y la técnica de Fer

La diferencia de temple entre Fer y Moisés se hizo palpable en uno de sus últimos roscos. Estaban empatados, con solo cuatro letras por acertar cada uno. En esos momentos en los que otros concursantes mantienen un pulso y aguantan pasando palabra a que el otro se lance a la piscina, Moisés decidió subirse al trampolín. Y se encontró sin agua. Falló la letra que creía saber y a partir de ahí, al tener un fallo más que decidía a favor de Fer en caso de empate, se lanzó a tumba abierta a ver si obtenía algún acierto entre las otras tres letras que le restaban. Misión imposible: fue dando palos de ciego y coleccionando únicamente errores.

Se quedó así solo Fer, con muchos segundos por delante y sus cuatro letras para completar el rosco. Se la jugó con la más fácil de ellas, la O. Pero dijo "omisión" y la respuesta correcta era "ocultación". Perdió entonces la oportunidad de ir a por el bote, pero el concurso debía continuar pese a que Moisés ya estaba fuera.

Sorpresa en Pasapalabra: Así es la novedosa técnica de Fer para ganar el rosco que dejó a Roberto Leal boquiabierto EL PERIÓDICO

"Ya no hay opción de bote, pero hay que seguir con el programa porque te quedan tres por delante y tienes 40 segundos. Hay que jugar a ver qué pasa", le advirtió Roberto Leal. Fer recogió el guante en clave estratega: "O sea, por estar seguros... Hay igualdad de aciertos, yo menos fallos... Entendemos la jugada...".

Te puede interesar:

"Tú lo dices todo", le soltó Roberto Leal con una sonrisa. Entonces Fer, como buen hombre de ciencias y calculador, tomó la decisión estadísticamente menos arriesgada: "Voy a hacer algo muy novedoso que no se ha hecho en televisión, la apnea".

A muchos les pilló a contrapié ¿Qué es eso de la apnea?. Pues básicamente lo que hizo Fer: poco menos que aguantar la respiración durante los 40 segundos que le quedaban y no soltar ni una palabra dejando que el tiempo se agotase, para no arriesgarse a acumular más fallos. Eso sí, le costó un poco aguantarse la risa mientras aplicaba su técnica de la "apnea". Pero fue más que suficiente para ganar la prueba del rosco y asegurarse otro concurso más en Pasapalabra.