LAS DOS FOTOS

TAt todos se nos ha ocurrido, a la vista de la foto de la Moncloa, evocar esa otra de las Azores, para visualizar mejor el cambio experimentado por nuestro país desde la victoria socialista del 14 de marzo. El 16 de marzo de 2003, en las Azores aparecían Bush, Blair y Aznar escenificando la terrible agresión a la legalidad internacional con la injusta y bárbara declaración de guerra a Irak. El 13 de septiembre de 2004, en la Moncloa, Zapatero, Chirac y Schröder daban vida a la foto de la reafirmación de la unidad europea y del protagonismo de la propia Europa frente a las sumisiones y a las hegemonías extracontinentales. Esa puede ser una lectura aproximada y generalizadora de los dos testimonios gráficos que nos afanamos en comparar y en resaltar. Y para España concretamente, la foto de este lunes supone nuestro reencuentro con la senda que jamás debimos abandonar, junto a los países que forman el corazón de Europa.

Las consecuencias de la foto de las Azores ya las conocemos todos desgraciadamente y las seguimos padeciendo. Hoy mismo, sólo en Bagdad cincuenta muertos y un montón de heridos, como casi todos los días. Parece que al fin Aznar tendrá que comparecer en la Comisión parlamentaria del 11-M para explicar su proceder. Hace unos días, representantes de la Asociación de Víctimas del 11-M me miraban extrañados cuando les preguntaba si esos atentados derivaban de la participación española en la guerra de Irak y me aseguraban que tal cosa no la dudaba ninguna de las víctimas. Así es que todas las bobadas que a los del PP ahora se les ocurren en torno a la foto de la Moncloa caen sobre sus atolondradas cabezas, una foto que sólo habla de Europa, de paz, de entendimiento y de democracia.