GUERRAS
Atrocidad en Ucrania
Martín Sagrera Capdevila
Madrid
El mundo está conmocionado por la tragedia del avión derribado en Ucrania, "atrocidad de proporciones indescriptibles", en palabras de Obama y otras equivalentes por parte de diversos gobernantes. Esto es dar por supuesto, sin esperar el imprescindible análisis que ellos mismos reclaman, que ha sido un acto voluntario, no un error humano o, como sugieren algunos, un fallo de uno de los dos radares del lanzacohetes. También apunta a la hipótesis del error la sorpresiva presencia de un avión de pasajeros en una zona de guerra, enorme error o imprudencia.
Esos políticos tendrían que tener una mayor conciencia de su responsabilidad, sin dejarse cegar por sus intereses políticos internacionales, ni por el demagógico gusto de hacer sentirse a los suyos mejores que los demás. Lo que es una atrocidad es la guerra, esa, sin duda, voluntaria, mientras que esas condenas sin pruebas suficientes lo que hacen de hecho es agravar el conflicto, en vez de promover, como dicen y quizá crean algunos, la paz.
DESTROZO DEL TURISMO
Ansia de votos
Ramón Torres
Coria
Por no hacer caso a la gente que trabajamos de manera profesional en el turismo en Coria, el ayuntamiento de esta ciudad está destrozando la posibilidad de generar turismo real en el Valle del Alagón. Por su ansia de darle al pueblo circo (y poco pan) para recabar votos, canibalizan todas las iniciativas del pueblo de Coria. En concreto, en este caso, el descenso del Alagón, que con el actual formato, inició Extremavela. A pesar de todas las reuniones, sugerencias, explicaciones y conocimiento que les hemos intentado transmitir durante años, desgraciadamente, desde el pasado día 17 de julio, el descenso municipal de Coria, ya no tiene plazas para atender a más público. Desde Extremavela ya lo avisamos: vamos a morir de éxito, no vamos a poder atender la demanda, esto lo inventamos nosotros y sabemos como se hace, vamos a hacerlo más días con menos gente para no comprometer la seguridad y no decirle a nadie que no podemos atenderle, no convirtáis esto en otra verbena. Ni caso. Ahora, el Ayuntamiento de Coria, veinte días antes del descenso del Alagón municipal, le ha estado diciendo a la gente de toda España y de todo el mundo que les llama que no puede atenderles, porque ya no hay plazas, y para mal de la ciudad, con una mala uva increíble, enviando a esta gente que ya no pueden atender a otras comarcas, sin derivarlas al Des-Ala, el Descenso de Extremavela, que se realiza en Coria todos los días de verano mañana y tarde desde el 2006. Eso, hasta hace dos o tres días. Ahora, simplemente, no contestan a los teléfonos de reservas. Y todo ello, sin cumplir con sus auténticas obligaciones: mantener el río Alagón limpio y cuidado, velar por sus distintas obligaciones de su mantenimiento, respeto al medio ambiente para desgracia de todos nosotros. De los hoteles, restaurantes y negocios, de nuestros hijos, familia, amigos... en fin, de toda la sociedad de Coria en general.
