TDturante las últimas semanas el Consejo Consultivo de Extremadura ha recobrado actualidad y me atrevo a decir que nunca en la historia del mismo se había hablado tantas veces de su función y sobre todo de sus actuaciones y dictámenes.

No es solo por la cuestión de la incompatibilidad de su anterior presidente y hoy consejero de Hacienda, en cuanto a sus trabajos e informes emanados o realizados en función de su responsabilidad en la institución o solicitados por otro tipo de instancias y por la controversia despertada una vez conocidos éstos, sino también porque recientemente ha sido publicada la Memoria del Consejo.

En la entrega de dicha memoria se pudo comprobar que las dos personas que han formado parte de la delegación del Consejo en la entrevista con el presidente de la Junta de Extremadura han sido cargos institucionales con altas responsabilidades en el Partido Popular hasta no hace mucho tiempo: el señor Nevado- Batalla , anterior consejero de Hacienda y hoy presidente del Consejo Consultivo; y el que fue presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero . En el artículo 5.5 de la ley de creación del Consejo se señala que los miembros serán independientes e inamovibles en sus cargos, distinguiéndose en cuanto a la duración de los mismos según sean consejeros electivos o permanentes.

Cuando los ciudadanos comprobamos la composición del superior órgano consultivo de la Comunidad, como es el Consejo Consultivo, y que de acuerdo con su legislación éste debe velar y ejercer sus funciones con autonomía orgánica y funcional, con el fin de garantizar su objetividad e independencia, nos cuestionamos que el carácter, fondo y criterios de la resolución de los dictámenes sean del todo ejercidos con la independencia que sería de desear y observar. No es una cuestión de compatibilidades sí o no solamente, sino de ponerse manos a la obra y cuestionar todo aquello que no funciona acorde a los tiempos actuales, porque será la única forma de preservar lo que sí funciona y construir de esta forma instituciones que sean reconocidas y valoradas como realmente independientes por la ciudadanía.