Vara gana su congreso

El presidente de Extremadura y líder de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, logró ayer un respaldo importante en el congreso regional de su partido, conformando una ejecutiva que le llevará hasta las próximas elecciones autonómicas con un apoyo del 77,6%. Ganador de las primarias frente a Eva María Pérez y Enrique Pérez Romero, continúa como secretario general del PSOE de Extremadura 4 años más habiendo conformado una dirección donde pasan a tener peso específico dos diputadas autonómicas: Lara Garlito, como secretaría adjunta a la secretaría general, y Marisol Mateos, como nueva secretaria de organización en sustitución de Ascension Godoy.

Destacan en el nuevo organigrama de dirección, además, los nombramientos de Alejo Salas como presidente regional del partido y Juan Antonio González como portavoz de la formación. Así mismo, Vara integra en el comité ejecutivo a uno de sus contrincantes, Enrique Pérez, así como a Leonor Martínez Pereda, quien inicialmente anunció su precandidatura, pero posteriormente la retiró. No ocurre lo mismo con la segunda contrincante, Eva María Pérez, que se queda fuera por cuanto que había solicitado formar parte del comité federal y no le ha sido concedido. En dicho comité federal sí estarán, en cambio, Blanca Martín, Francisco Fuentes, Miguel Ángel Gallardo, Estrella Gordillo, Miguel Ángel Morales e Isabel Gil Rosiña, una mezcla de veteranía y jóvenes valores fieles al secretario general.

Después del importante desgaste sufrido por Guillermo Fernández Vara tras su evidente apoyo a Susana Díaz y su consiguiente oposición a Pedro Sánchez, el mandatario extremeño no queda mal parado en su territorio. No solo ha ganado sus primarias frente a dos alternativas, una de ellas claramente sanchista, sino que ha conseguido revalidar un congreso regional donde no estaba del todo claro el apoyo mayoritario de la militancia.

La estabilidad de Extremadura también pasa por la estabilidad del partido que sustenta al gobierno y parece que, tras la tempestad, llega por fin un periodo de calma. Vara realiza un cierto ejercicio de integración llamando a militantes que apoyaban a otros candidatos, pero se reserva puestos claves para sus próximos.

Tiempo habrá de saber qué desarrollo tienen los acontecimientos en un PSOE con un fuerte asentamiento territorial, que ha cambiado en los últimos años radicalmente y que aún no conoce su destino final.