Adoras al dios equivocado -le reprocha un joven musulmán al inglés cristiano disfrazado de judío para estudiar en la prestigiosa escuela del sabio persa Avicena en la película El médico. Mucho ha cambiado el mundo, mas de siempre el ser humano ha buscado en una entidad espiritual que trascienda su pequeñez, la explicación de la existencia, del bien y del mal y la inmortalidad que ofrezca sentido a la vida y mitigue el dolor de la muerte. Por eso nacieron las religiones. Enfrentadas a veces hasta el odio unas y otras, -siempre la estupidez humana- pero con el mismo fin.

Envueltos por la sobreinformación, cifras, reproches, fiestas ilegales, caravanas de encerrados a quienes se afea que acudan a sus playas o segundas residencias, en contraste humillante con franceses y alemanes que aterrizan en España porque aquí hay más libertad- ¡será para ellos!-, en esta semana tradicionalmente religiosa, hemos perdido, como tantas cosas arrebatadas por el virus, el color, el sonido, el rito, fuera este creencia cierta o folclore de arte y belleza, de la Semana Santa. Sin procesiones ni Cristo del Amparo ni Negroni de la Legión ni Dolorosa ni Madrugá. Sin saetas ni flagelantes ni capirotes ni nazarenos ni mantillas negras ni penitentes. Sin la Cruz, paradoja de amor que da sentido al dolor. Con colas, sí, pero no para besar a Dios muerto, sino para la vacuna. Por eso no recuerdo otra semana de pasión triste como esta que replica el sufrimiento del año pasado, pero con muchos más ausentes desde entonces, y este interminable cansancio, desasosiego y hartura.

El cristianismo adora al Dios del amor, y en esta semana conmemora que su hijo llegó al extremo de morir por amor. Unamuno convirtió a su San Manuel Bueno en un mártir, que aún sin creerlo, veía en ello una fuente de vida y esperanza para paliar el dolor. Quizá en los años que muchos llevamos vividos, justo ahora que tantas cruces quieren hacer desaparecer, con un sectarismo que desprecia el consuelo de su presencia, nunca haya habido una Semana Santa con una significación tan exacta como esta.

*Profesora