El 14 de marzo del 2020 había un total de 95 residentes en el centro de alzhéimer Los Pinos de Plasencia. Desde esa fecha y hasta el 21 de junio, murieron 28 y el covid-19 pudo ser la causa de 23 de estas muertes.

Así lo refleja un informe firmado por el director gerente del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad), José Vicente Granado, del pasado 11 de junio, que responde a una petición de información realizada por el portavoz de familias de los fallecidos el 12 de abril.

Esta resolución señala que 16 de los residentes fallecidos murieron por el covid-19, mientras que en otros 6 casos se sospecha que el virus pudo ser también la causa y otro residente falleció «con causas asociadas» a síntomas provocados por el virus.

Estos datos dan la razón a los familiares que interpusieron una querella contra el ahora exdirector del centro, que siempre han venido advirtiendo del elevado número de muertes en esta residencia placentina.

Porque los 23 fallecidos suponen el 24,2% de los residentes que había cuando se inició el confinamiento, un porcentaje cuatro veces mayor al de la media de mayores fallecidos por covid en las residencias del país, un 6%, según un informe realizado por el grupo de trabajo Covid-19 y residencias a nivel nacional y presentado al Consejo Territorial de Servicios Sociales y del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia.

La instrucción de la querella

«Los datos piden que se investigue» lo ocurrido en la residencia Los Pinos porque «la vida y la salud son un derecho fundamental y estamos hablando de delitos muy graves».

Son palabras de Félix Pérez, portavoz de las familias querellantes, que temen que el juzgado que investiga el caso opte por archivarlo en lugar de abrir juicio oral.

Opinan así porque, según señala Pérez, el juez ya ha desestimado varias propuestas suyas de declaraciones en la instrucción, como la de "personal de enfermería que se prestó voluntario o varios familiares». Ahora, aportarán la comunicación del Sepad con los datos con el deseo, «por nuestros familiares» de que no cierre el caso.