El Programa de intervención  Social con niños y niñas y jóvenes gitanos, está dirigido a la prevención y la lucha contra el fracaso y el abandono escolar en niños y jóvenes gitanos en la Comunidad Autónoma de Extremadura.

Se encuentra enmarcado en el Programa Operativo Fondo Social Europeo de Extremadura y está gestionado por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales y la Consejería de Educación y Empleo, a través de la Dirección General de Servicios Sociales, Infancia y Familias.

El proyecto está compuesto por dieciocho promotores y  cinco técnicas que trabajan en distintas localidades como Badajoz, Cáceres, Mérida, Olivenza, Miajadas, Villafranca de los Barros, Montijo, Zafra, Almendralejo, Vegas Altas y Plasencia.

Este programa atiende a menores con edades comprendidas entre los cero y los dieciséis años, que presentan necesidades socioeducativas relacionadas con la escolarización temprana, el absentismo, el fracaso y el abandono escolar. “Les damos asistencia y les inculcamos que trabajen y luchen por estar ahí, que se queden para que el día de mañana tengan un buen futuro, y no cumplan los dieciséis años y salgan del instituto”, explica Daniel Silva, uno de los promotores de Plasencia.

Durante el curso académico, los promotores intervienen en la mediación entre los equipos directivos y los equipos de orientación, “nos reunimos con ellos para tratar las faltas de asistencia, diseñar actuaciones para  superar el absentismo o mejorar la escolarización y resolver conflictos puntuales”.

Por otro lado, también fomentan el valor de la escolarización entre las familias, orientando y apoyando el seguimiento en este proceso e informando sobre la importancia de la educación. “Contactamos con los padres, impartimos charlas de sensibilización desde la guardería y tratamos de que participen en los actos educativos y culturales que organizamos nosotros y los centros, como el Día del Pueblo Gitano y de la Cultura Gitana, Día del Libro, Día de la Madre y Día de la Paz, entre otros”.

En esta época estival, el proyecto lleva a cabo un campamento de verano. En Plasencia asisten todas las tardes niños con edades comprendidas entre los seis y los doce años para realizar tareas y actividades educativas, dinámicas y lúdicas. “Es un proyecto muy bonito porque nos apoyamos mucho en ellos y hacemos múltiples actividades”. Los lunes, martes y jueves acuden a un espacio donde desarrollan juegos de ocio y tiempo libre, y hacen uso de un campo de fútbol donde organizan partidos. Los miércoles y viernes van a una biblioteca en la que ven películas, hacen manualidades, dibujan, y llevan a cabo actividades relacionadas con el pueblo gitano.

Los promotores recogen a los niños todas las tardes en sus propios vehículos, “vamos casa por casa recogiéndoles para acercarles al lugar donde realizan las actividades y, cuando finalizan, les llevamos de vuelta a casa”.

En base a los resultados obtenidos en años anteriores, el impacto que tiene el desarrollo de este programa es altamente positivo. Los promotores educativos son referentes e instrumentos clave para la inserción y el éxito escolar, siempre de la mano de la colaboración por parte de las familias, el centro educativo y los propios menores a los que tratan de inculcar la importancia de la educación y la asistencia a clase.

Daniel Silva y Antonio Montaño, dos de los promotores del proyecto. El periódico