Fundador de la firma de bisutería Cristian Lay, propietario de la papelera Matías Gomá Tomás o firmas de energías renovables como Alter Enersun, entre otras, Ricardo Leal Cordobés es el único empresario que ha sido reconocido en dos ocasiones como Empresario Extremeño del Año. Ganador en 2020 tras hacerse con el Grupo Gallardo, en solo un año ha conseguido reflotarlo y aumentar su plantilla en 100 trabajadores. Con 26 empresas de todo tipo formando parte de Grupo CL, Leal afirma que en la calidad de su equipo humano reside el éxito de su holding.

Ha vivido usted muchas crisis y de todo tipo ¿Cómo ha afrontado esta última, distinta a todas?

Efectivamente, ya tenemos muchas crisis a nuestras espaldas y esta la he vivido como otra más. Nuestro grupo de empresas está muy diversificado. Al final tienes que pensar qué debes hacer en el momento y las circunstancias que vives. Los empresarios debemos tener cintura, porque en un momento determinado te cambian las reglas del juego. En las crisis es importante decidir en el momento qué es lo que debes ir haciendo. Esta crisis para algunas empresas dentro del Grupo CL ha sido un problema, pero para otras ha sido una oportunidad. Tenemos que adaptarnos a las circunstancias, a los nuevos retos. Las empresas son un ente vivo y ningún día es igual a otro. No me gusta hablar de crisis, sino de que tenemos reglas nuevas de juego a las que adaptarnos. Detrás de cada crisis se esconde una oportunidad, si te adaptas.

El año pasado protagonizó una operación que le convirtió en el Empresario Extremeño del Año tras hacerse con el Grupo Gallardo ¿Ya ha empezado a dar sus frutos?

Sí. Desde el primer momento. Era una compañía que venía arrastrando dificultades, sobre todo económicas. Le hemos dado la vuelta a la situación muy rápidamente y ahora todo el Grupo Gallardo está funcionando a full time y creciendo. Hemos generado más de cien puestos nuevos de trabajo dentro del grupo. Estamos muy contentos de cómo marcha. Son empresas con un área de mejora muy grande. Hemos introducido nuestro modelo de gestión y modernizado la compañía, que arrastraba dificultades desde la crisis de la construcción. En cuanto hemos cambiado la fórmula de trabajo ha empezado a dar frutos. 

Es el único empresario que ha ganado dos veces el premio de El Periódico Extremadura ¿Qué le dice esa circunstancia y cómo la vivió la última vez?

La viví encantado. Fuimos los primeros hace veinticinco años y hemos seguido trabajando con constancia, creciendo, generando riqueza… No solo nos hemos mantenido, sino que hemos crecido mucho. Estoy contento de haber desarrollado un grupo empresarial grande en todo este tiempo.

Comenzó de joyero y en la actualidad ha diversificado su negocio con las energías renovables. ¿Lo ha hecho por intuición o por convicción?

Por convicción. La joyería está en mis comienzos, pero el mundo actualmente se encamina a las energías renovables. Tienes que montarte en el carro de las empresas de futuro. Nosotros no paramos nunca. Hay quien se aferra únicamente a lo que tiene. Nosotros siempre vamos entrando en lo nuevo para crear una compañía con futuro para al menos otros 25 años más. Tenemos que ser un grupo empresarial consolidado y que esté al día en las últimas tecnologías. Empezamos a operar en el campo de las energías renovables en el 2009 y en la actualidad nos encontramos con ‘los deberes hechos’ en ese mundo. 

¿Cuál es en la actualidad la radiografía del Grupo CL grosso modo?

En estos momentos somos 26 empresas dentro de Grupo CL, abarcando el mundo de las energías renovables, sector químico, sector de la construcción, el mundo del packaging, sector papelero, sector cosmético y sector siderúrgico. Tenemos un grupo bastante diversificado.

Ricardo Leal, presidente del Grupo CL.

Ricardo Leal, presidente del Grupo CL. EL PERIÓDICO

Además, usted es presidente de la Corporación Empresarial de Extremadura ¿Qué mensaje les transmite a los empresarios en estos momentos de incertidumbre?

Vienen tiempos nuevos y tenemos que adaptarnos a ellos. Lamentarse no sirve de nada. Han cambiado las reglas de juego y hay un montón de nuevas oportunidades, pero hay que buscarlas. Si siempre hacemos lo mismo no conseguiremos nada nuevo. De alguna manera tenemos que ‘reinventarnos’ y adaptarnos a los cambios del mercado, que seguirán apareciendo. Al final todo es consecuencia de la propia evolución humana en todos los aspectos.

¿Se ve ya algo de luz al final del túnel de la crisis?

Nunca he visto un túnel. Desde el minuto uno había que adaptarse. Hay que ver luces siempre, porque si te sientes dentro un túnel y no ves la luz es que tienes un problema. Nunca me he sentido a oscuras, hay oportunidades siempre. Han cambiado las reglas de juego y hay un montón de nuevas oportunidades. En el mundo empresarial siempre hay que ser optimistas y saber que siempre puedes hacer cosas. 

¿Cree que los Ertes han sido la mejor solución a la situación?

En cada empresa concurren circunstancias distintas. En muchas compañías de hostelería, venta al detalle o restauración las ventas se han venido abajo y en ellas los Ertes han sido una gran solución para que puedan subsistir. De no ser así habría sido un desastre. En nuestro grupo hay empresas que los han necesitado, pero en otras no los hemos ejecutado. Todo lo contrario, hemos vendido y crecido más que nunca. No han hecho falta. En el mundo de la empresa no todo es blanco o negro, depende de las circunstancias de cada sector.

¿Qué significa internet en el sistema de venta por catálogo? ¿Se va a perder la llamada a la puerta?

La venta por internet es un canal que se nos ha abierto y la venta puerta a puerta otro sistema. Durante la pandemia no se pudo trabajar con el sistema puerta a puerta, que ahora con el fin de las restricciones de movilidad vamos a retomar. Internet es otro canal distinto, simplemente. 

¿Cómo ve el mercado de la energía actualmente en nuestro país y especialmente el mundo de las renovables?

Las renovables van bien, pero me preocupa mucho el coste energético para las empresas. Todos estamos sufriendo el coste del kilovatio. Cuando no tenemos sol o viento tenemos que obtener energía y eso es preocupante.

Ricardo Leal junto a su hijo Víctor Leal.

Ricardo Leal junto a su hijo Víctor Leal. EL PERIÓDICO

Usted se enfrentó a un duro momento tras la explosión de una petroquímica de su grupo en Tarragona ¿Ha elevado los controles de seguridad en sus empresas?

Fue un desgraciado accidente. No por falta de seguridad, que es un aspecto que siempre hemos cuidado muchísimo. Es una prioridad en todas las empresas de la compañía, como no puede ser de otra manera. Siempre buscamos la máxima seguridad de todo el personal de Grupo CL y del resto de ciudadanos. Los accidentes, por desgracia, ocurren. Hoy en día no sabemos las causas de ese, pero nunca hemos bajado la guardia.

¿Cómo le explica a un cliente la situación de aislamiento de Extremadura por ferrocarril?

Necesitamos una estructura que nos pueda conectar con el resto de España y de Europa por ferrocarril. En cualquier mapa se ve claramente que estamos aislados. Es un tema que tenemos que mejorar. Es necesario ocuparnos de tener buenas comunicaciones.

¿Cree que la figura del empresario tiene el reconocimiento que merece en nuestra sociedad?

Sí, pero creo que el reconocimiento al empresario es mejorable. Hay empresarios que sí ven reconocido su trabajo, pero todos nos tenemos que encargar de mantener una buena imagen. Los trabajadores tienen que sentirse a gusto en sus quehaceres y todos deben participar. Al respecto, tengo que decir que me encuentro muy orgulloso de mi equipo humano. Hay quienes contemplan a los empresarios tildándolos de explotadores. Al final, la oportunidad de ser empresario la tiene todo el mundo. La responsabilidad la tenemos todos. Lo que no podemos hacer es quejarnos y pensar que la culpa es de los demás. Y este es un país de oportunidades para todo el mundo.