La cancelación supone un duro mazazo para Barcelona. El año pasado el impacto económico del MWC fue ligeramente superior a los 473 millones de euros. Para esta edición, el ente organizador, tenía previsto mejorar sus resultados y aportar hasta 492 millones, cifras ahora sepultadas por el anuncio de suspensión. De esos 492 millones, el sector de la hostelería esperaba captar hasta un 20%, mientras que el de la restauración también se verá resentido. Entre 2006 y 2020 el impacto total del congreso asciende hasta los 5.300 millones de euros.

Los ciudadanos y comercios también notarán los efectos del forzado adiós. El año pasado generó 14.000 puestos de trabajo temporales, una cifra que este año preveían aumentar hasta los 14.100. En sus catorce ediciones, la feria de telefonía móvil creó una ocupación temporal de hasta 128.200 casos.