Amber Heard ha renunciado a la solicitud inicial de pensión de manutención temporal que había presentado en la demanda de divorcio contra Johnny Depp. Según desvela 'TMZ', la actriz ha tomado esta decisión porque quiere centrar la batalla legal en los presuntos malos tratos que le infligió el actor durante su matrimonio, al que acusa de haberla agredido física y psicológicamente durante los 15 meses que compartieron vida.

Según Heard, la petición de 50.000 dólares (unos 44.000 euros) mensuales está siendo utilizada por el equipo legal de Depp para "desviar la atención del público del problema real que es la violencia de género".

La petición de 50.000 dólares se basa en las ganancias de Depp, que según algunos cálculos ascendieron a 27 millones de euros solo durante el año pasado, y tiene como justificación el dineral que le va a costar el proceso legal de separación del protagonista de 'Los piratas del Caribe'.

La renuncia a la pensión es temporal y puede volver a reclamarla en el futuro, pero la actriz quiere primero solucionar otras cuestiones del divorcio, como la orden de alejamiento temporal interpuesta contra su exmarido que todavía sigue vigente, por lo que Depp no puede acercarse a más de 91 metros de su ex.

Varios amigos y familiares del actor han salido en su defensa desmintiendo que agrediera a Heard, que este lunes llamó a la policía para denunciar que allegados de su ex entraron en la casa de Los Ángeles donde vivían para recoger las pertenecías del actor.