Los motivos del Renault Austral

El Austral se convierte en el buque insignia de la firma francesa al mostrar una clara evolución en diseño, confort de rodadura y electrificación de su gama.

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RDAM1397776 / TIBO

Telva Somoza

El Renault Austral fue presentado por la marca como el lanzamiento más importante del año, además del “coche más español de la historia”. Tres son las fábricas implicadas en su ensamblaje final: Valladolid, Palencia y Sevilla. Todas ellas hacen de este SUV, de 4,51 metros de largo, un modelo digno del Premio al Coche del Año de los Lectores de Prensa Ibérica 2023. Además, de ser uno de los finalistas del Car Of The Year, el galardón más prestigioso a nivel europeo. En este artículo contaremos el porqué de su éxito.

Renault  encuentra en pleno proceso de reconversión de su modelo de negocio, derivado de la llegada de Luca de Meo a la presidencia y la puesta en marcha del plan Renaulution. Una de las consecuencias es la apuesta por el segmento C, cuya oferta Renault reforzó durante 2022 con el Austral y el Megane E-Tech 100% eléctrico.  

Un SUV de familia

 Lo primero que impresiona en el Austral es su diseño exterior, de clara inspiración crossover pero con detalles que ya vimos en el Renault Mégane E-Tech 100% eléctrico. Hablamos, por ejemplo, del embellecedor del paragolpes inferior, las llantas de hasta 20 pulgadas, el nuevo logotipo central del rombo como protagonista y los icónicos grupos ópticos en forma de C. La firma lumínica sigue siendo un as bajo la manga de Renault y mejora todavía más en la parte trasera.

La modernidad que imprime la carrocería del Austral se certifica en su interior, un habitáculo protagonizado por el salpicadero OpenR y sus dos pantallas de gran tamaño. La instrumentación digital, de 12,3 pulgadas, es configurable, y de la central, de 12 pulgadas, destacamos su posición vertical y la interfaz desarrollada junto a Google. Compatible, eso sí, con Apple CarPlay. Los niveles de acabado empiezan en el Equilibre, Techno e Iconic, estos dos últimos con paquete Esprit como extra.

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Detalle del salpicadero OpenR y sus dos pantallas de gran tamaño.

A la sofisticación del diseño tecnológico se le une la sensación de espacio de este Renault Austral. Con 2,66 metros de distancia entre ejes, y una banqueta posterior desplazable (16 centímetros), el espacio para las plazas traseras es de las mejores del mercado y se puede regular la inclinación de los respaldos en tres posiciones. El maletero alcanza los 575 litros con la fila avanzada, dato que le iguala al resto de alternativas en su segmento y que se reduce a 555 litros en la variante híbrida con los asientos deslizados.

El camino marcado

 La mecánica vuelve a ser lo relevante en este Renault Austral, especialmente por su enfoque sostenible. La gama comercializada incorpora, en todas sus versiones, algún tipo de electrificación. El portfolio arranca con dos opciones mild hybrid de 12 V (microhíbridas) de 140 CV y 160 CV de potencia, con un precio de partida de 30.900 euros. En las variantes híbridas llega junto al nuevo bloque gasolina de 1.2 litros y 3 cilindros, que rinde 130 CV con un par máximo de 205 Nm. Este E-Tech full hybrid de 200 CV, incorpora dos motores eléctricos (motor de tracción de 50 kW y generador), una batería de mayor capacidad (400 V) y parte de los 39.600 euros con el acabado Techno. No se esperan variantes híbridas enchufables, de tracción total y 100% eléctricas.

 Este último, el más potente, destaca por su consumo contenido, homologado en 4,5 l/100 kilómetros, y la calidad de rodadura en vías rápidas. Además, y gracias al sistema de eje trasero direccional, se desenvuelve de maravilla entre el tráfico urbano, lo que le convierte en un excelente coche único de familia. Motivo de más para incorporar lo último en sistemas de seguridad, con hasta 32 ADAS (ayudas a la conducción y seguridad) que lo clasifican en el nivel 2 de conducción autónoma.