Salmorejo al toque de cereza DOP Valle del Jerte con crujiente de panceta ibérica; revuelto de trigueros, boletus y otros frutos de la dehesa; solomillo asado de ternera de Extremadura IGP con salsa tandori-Masala y, de postre, cuajada casera con mermelada de Cerezas y miel DOP Villuerca-Ibores, todo ello regado con vinos DO Ribera del Guadiana. Es la propuesta que Cáceres lanzó en el dossier para ser Capital Española de la Gastronomía en 2015 como Menú Capital, una de las acciones del galardón que lucirá la ciudad durante doce meses.

El proyecto plantea este ejemplo, pero se especifica que cada restaurante contará con un menú especial por la capitalidad con un precio cerrado y que irá variando "en función de los productos de temporada de cada época del año y de la climatología". Al igual que en la restauración, en bares y cafeterías, lo que habrá será una tapa específica dedicada a la condición de Cáceres como Capital de la Gastronomía, y también en los hoteles se ofrecerá un picnic conmemorativo a base de vino Ribera del Guadiana, quesos y embutidos. En línea con ese menú especial, también se plantea el Bono Capital Gastronómica 100, que propone un menú degustación en dos o tres establecimientos por un precio cerrado de 100 euros. Y para que la capitalidad sea visible en la ciudad, banderolas y carteles.

EL 28 DE ENERO Son algunas de las iniciativas que se recogen en el proyecto a desarrollar a lo largo de los próximos meses para que se ponga en marcha en enero.

La fecha clave es el 28 de enero de 2015, cuando arranca en Madrid la Feria Internacional de Turismo (Fitur) en la que Cáceres tomará el testigo de Vitoria como Capital Española de la Gastronomía. Por delante quedan tres meses en los que habrá que definir y desarrollar el programa que logró convencer al jurado, y que tiene como ejes la participación de ciudadanos y turistas, los productos locales y la tradición gastronómica de las tres culturas de la ciudad o al influencia portuguesa en los fogones. Para hacerlo contarán con un presupuesto de 621.000 euros que aportan gobierno regional, diputación, ayuntamiento y Consorcio Cáceres Ciudad Histórica. Como figura en el dossier, las 8 denominaciones de origen de la región y las 2 indicaciones geográfica con los principales baluartes de la gastronomía, aunque también se quiere potenciar algunos otros tesoros de los fogones como la caza, los productos de la huerta, el arroz o el higo.

PROFESIONALES El proyecto incluye una decena de propuestas innovadoras que comienzan con un encuentro gastronómico con cocineros de Vitoria para conmemorar el relevo al frente de la capitalidad, en el contexto de unas jornadas formativas abiertas a los alumnos de Hostelería y que desarrollarían un proyecto de fusión gastronómica de la cocina extremeña y vasca, plasmado en un menú.

El proyecto también se fija en algunas experiencias de convivencia con el entorno y con un cariz gastronómico, que plantea como slow food experiences : paseos por la dehesa, ser pastor por un día, convivir con bodegueros o participar en la recolección de cerezas.

Otra acción incluye 6 tipos de rutas por bares, cafeterías y restaurantes de la ciudad, pero también por tiendas especializadas, por confiterías tradicionales o por espacios con menús adaptados a personas con restricciones alimentarias.

Las jornadas profesionales en torno a la gastronomía serán otras de las actividades a lo largo del año. Se plantean varias citas, entre ellas un encuentro de bloggers e instagramers gastronómicos, que durará un fin de semana y convocará a expertos de toda España. También se propone un foro de turismo gastronómico que sirva como punto de encuentro para los profesionales del sector

El programa no olvida una de las actividades más monumentales asociadas a la Capital Española de la Gastronomía, como es el evento de récord. En el caso de Burgos fue con una morcilla gigante y Cáceres planta el bocadillo de ibéricos más grande del mundo. Es una cita que pretende implicar especialmente a la ciudadanía, al igual que el brindis colectivo que se plantea para la inauguración de la Primavera Enogastronómica que promueve la ruta del vino Ribera del Guadiana.

NIÑOS Y MAYORES Otra de las citas que se propone, bajo el nombre de Los Fogones de las Abuelas, pretende dar al protagonismo a los mayores, para que muestren la elaboración de los platos más tradicionales de la gastronomía local. Y para los más pequeños, actividades teórico-prácticas relacionadas con la cocina saludable y la nutrición, en un entorno lúdico, que incluye visitas a industrias agroalimentarias.

El proyecto tiene también en cuenta el maridaje del patrimonio cultural de la ciudad con la gastronomía. Por eso plantea una acción gastronómica en la que se elaborarán platos representativos de las culturas árabe, sefardí y cristiana, y también una experiencia gastronómica en espacios emblemáticos de la ciudad que se convertirán en restaurantes eventuales con menús elaborados por cocineros locales.