500 cooperativistas están afectadospor el retraso del residencial La Moraleja

El presidente de la cooperativa, que se hizo con los terrenos hace seis años, comentó que los cooperativistas han desembolsado "alrededor de trescientos millones de pesetas" (1,8 millones de euros), un dinero que se destinó a la compra del terreno y a la elaboración de proyectos y estudios geotécnicos. Los terrenos afectados por esta intervención, tanto de la propuesta de PIR como los de La Moraleja, están dentro de la Zona de Especial Conservación (ZEC) de los Llanos.

El presidente de la cooperativa indicó que el suelo está dentro de la zona de uso general que se establece en el plan rector de uso y gestión (PRUG) de los Llanos de Cáceres, "la misma" clasificación que "La Mejostilla", comentó el presidente de la cooperativa, que añadió que cuentan "con un certificado" en el que se indica que "desde el punto de vista ambiental no hay problemas". Lucio confió en una respuesta positiva de la agencia tras la aprobación final del PRUG, un documento que está en fase de examen de las alegaciones presentadas a su ratificación inicial.

En cuanto a los contactos ante el ayuntamiento, Lucio explicó que los terrenos se incluyeron inicialmente dentro de la prioridad tres del nuevo plan general municipal (PGM) de urbanismo, a desarrollar a muy largo plazo. "A lo que se alegó", comentó Lucio, "aceptándose esta alegación", agregó, en los dictámenes de la comisión de Urbanismo para que se incorporase a los sectores calificados de prioridad uno.

La Agencia de la Vivienda llegó a referirse a esta actuación hace un año, aunque en los últimos meses se ha trabajado en desarrollar el proyecto de interés regional del Junquillo, que cuenta con aprobación, y en la tramitación de otro proyecto parecido en el terreno de la cantera de Olleta y en sus inmediaciones.

KILOMETRO La cooperativa Pablo Iglesias, con la aportación de sus socios, compró el terreno hace seis años. Un año después se presentó ante el consistorio una propuesta para el desarrollo de una urbanización con quinientas viviendas que se denominó La Moraleja. Esta iniciativa se acogía a la Ley de Fomento de la Vivienda o Ley del Kilómetro.

El consistorio no la aceptó inicialmente y se presentó una nueva propuesta por parte de la sociedad cooperativa, informándose por el ayuntamiento que, aunque técnicamente se podía acoger a los condicionantes que establecía la ley del Kilómetro, se consideraba desde la dirección general de la Vivienda de la Junta que ya no concurrían las condiciones para aprobar otros proyectos de la Ley de Fomento de la Vivienda al considerarse adecuada la oferta de vivienda de protección oficial y que las condiciones de carestía de suelo para este tipo de casas ya no se daban.

Según observaciones que ha realizado la cooperativa, y que se incluían en la defensa que de su proyecto hacía en las alegaciones presentadas al plan general municipal de urbanismo, esa situación ha variado considerablemente cuando desde la Junta se está promoviendo el desarrollo en Cáceres de viviendas del plan especial, conocidas como de 60.000 euros, con el desarrollo del plan de vivienda 2004-2007.

Aunque en su tramitación inicial hace cinco años se planificó con 500 viviendas, en la propuesta que posteriormente se presentó ante la Junta para su tramitación como proyecto de interés general aparece con unas 900 viviendas y con una superficie superior, al incorporar, además del suelo de la cooperativa, terreno de otra empresa promotora y de un particular propietario de suelo en la zona.

El proyecto de La Moraleja se presentó con una oferta de 422 viviendas unifamiliares y 78 en bloques. De las unifamiliares, 190 serían de protección oficial y otras 232 pisos medios con una altura máxima de dos plantas. Esta promoción se planteó pensada, principalmente, para trabajadores de la universidad.