El pasado jueves abrió una nueva gasolinera en el tramo cacereño de la autovía A-66, más concretamente, en el Casar de Cáceres. Se une así a las otras catorce que hay en la ciudad y las tres que ya existen en la localidad vecina. Su apertura es tan reciente, que ni siquiera figura en Geoportal, el buscador de estaciones de servicio del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital.

La promotora de esta instalación, que tiene cuatro pasillos dobles para el repostaje de combustible Repsol, es María Ángeles Santiago Castro. Natural del Casar de Cáceres, su familia es muy conocida en el pueblo y en la capital provincial por regentar el restaurante El Gallo, situado en la N-630. «Al abrir la autovía, nos resentimos, por eso compramos este terreno, abrimos primero el nuevo restaurante y, luego, la gasolinera», explica María Ángeles Santiago.

En la carretera nacional hay varios locales de restauración y alojamientos en su tramo casareño, algunos de ellos ya han echado el cierre. Desde que abrió la autovía en 2006, el tráfico ha descendido considerablemente por la antigua N-630 y eso ha afectado a los establecimientos que habían crecido en sus márgenes.

María Ángeles Santiago espera continuar expandiendo el negocio con la apertura de un alojamiento con 18 habitaciones, que complementaría a la gasolinera y el restaurante, «vamos despacito, sin prisa, pero sin pausa», aunque aún no se atreve a dar una fecha precisa para su inauguración.

De momento, entre los dos establecimientos abiertos dan empleo a casi una treintena de personas, «ocho en la gasolinera y unos veinte en el restaurante», explica la promotora casareña, que prevé que este número se amplíe considerablemente cuando abra el hotel.

La nueva zona de descanso en la A-66 aún no está señalizada en la autovía, «ya lo hemos solicitado», explica María Ángeles Santiago, «porque todavía hay mucha gente que no lo sabe».

En cuanto a la polémica surgida en el barrio de El Vivero de Cáceres por la construcción de una galinera de cuatro surtidores en el corazón del barrio, María Ángeles Santiago se muestra favorable «si crea puestos de trabajo». Añade esta promotora que «siempre va a haber gente que no esté contenta», e insiste, «no voy a hablar en negativo».

A menos de una semana de su apertura, al establecimiento van llegando vehículos y clientes, aunque, «hasta que no estén los anuncios en la autovía», la dueña no espera que el negocio depegue.