Compartieron un día de copas tras realizar un examen en su facultad, la de Veterinaria, y también sexo. Sería una situación normal, y en ningún caso delictiva, de no ser porque al día siguiente él fue acusado de abusar sexualmente de su amiga al haberse "aprovechado" de su estado de embriaguez para mantener relaciones con ella.

Ocurrió hace algo más de dos años y ayer tuvieron que revivir lo sucedido en el juicio que se celebró en la Audiencia contra José P. L. G., al que el fiscal acusa de un delito de abuso sexual por el que pide para el acusado 6 años de prisión.

Era le pena que el fiscal solicitó tras la instrucción de la causa y fue la que ayer, tras el juicio, mantuvo pese a que el acusado proclamó una y otra vez su inocencia, asegurando que las relaciones sexuales que mantuvieron fueron consentidas. Llegó incluso a afirmar que fue la chica la que las inició. Pero tanto el Ministerio Público como la acusación particular mantuvieron que por las condiciones en las que la joven se encontraba por la ingesta de alcohol, sin acordarse ni siquiera de lo que había ocurrido entre las ocho de la tarde y las seis de la mañana, las relaciones se consideran no consentidas por ella, lo que constituye un delito de abuso sexual.

José P. L., que no pudo en algunos momentos del juicio evitar las lágrimas, reconoció en la vista que cuando se marcharon del segundo bar en el que estuvieron ella estaba muy mal. También que al parar a echar gasolina, "porque ella me dijo que tenía que ir al servicio", donde se cayó, el rechazó el ofrecimiento de los empleados de la gasolinera de pedir una ambulancia "porque yo la iba a llevar a su casa, y si no lo hice fue porque no conseguí que ella me diera la dirección exacta". Fue por ello por lo que la llevó a la suya, "donde la acosté y después me puse a ver la tele hasta que ella me llamó, me insistió en que me quedara con ella y comenzó a tontear conmigo hasta que mantuvimos relaciones".

Su entonces amiga y compañera --ya no mantienen relación alguna y ella ha tenido que marcharse a otra ciudad a estudiar-- reconoció que antes de los hechos que ayer se juzgaban habían mantenido sexo "una sola vez" hacia un año.

Aseguró que no recordaba nada de lo ocurrido aquel día desde las ocho de la tarde, algo que corroboraron como cierto los peritos y psicólogos, y que si denunció fue porque en el hospital, al que acudió para una prueba vaginal, le indicaron que para hacérsela tenía que denunciar. "Estaba preocupada porque había despertado sola en una habitación de una casa a la que no recordaba como había llegado, porque él cuando le pregunté qué había pasado no me dijo nada de habernos acostado y como tenía la ropa interior del revés y ningún recuerdo de ciertas horas pensé que alguien pudiera haber abusado de mí".

Para el fiscal, que llegó a reconocer que se trata de un caso "bastante complejo", y para el abogado de la joven, está probado que él cometió un delito, mientras que la defensa insistió en que no hubo delito porque fue una relación consentida.