Adena solicitó ayer a la Confederación Hidrográfica del Tajo la declaración del río Almonte como reserva ambiental hidrológica de acuerdo al articulado de la Ley del Plan Hidrológico Nacional. La petición se hace en vísperas de la presentación del Plan Nacional de Restauración de Ríos en la cuenca del Tajo, que se celebrará hoy en Madrid. La solicitud de Adena se suma a la iniciativa de la asociación Aems-Ríos con Vida.

Según informó ayer Adena, esta figura de protección promueve la conservación de los ríos en su estado natural, incluyendo la prohibición de otorgar autorizaciones o concesiones. En los últimos años, según recordó la asociación conservacionista, el Almonte ha sido objeto de nuevas solicitudes para construir embalses, a pesar de sus valores ambientales y de las alternativas existentes para el abastecimiento de agua que, además, resultan menos costosas que el embalse.

La asociación respalda su petición en que el Almonte es uno de los cursos fluviales mejor conservados de nuestro país y en este momento está libre de cualquier tipo de regulación. Recorre aproximadamente 100 kilómetros desde su nacimiento a la desembocadura en el río Tajo y atraviesa zonas de excepcional valor biológico, que lo convierten en un corredor natural de primer orden. Por ello, "el río Almonte y una parte de sus afluentes fue declarado como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC)", destaca Adena.

El río Almonte mantiene 16 hábitats y 7 especies de interés comunitario, según la directiva de hábitats, recordó la asociación, que apuntó que entre los valores ambientales de este espacio figuran una rica comunidad vegetal, una completa y diversa comunidad de peces, propia de un río mediterráneo sometido a fuerte estiaje, así como numerosas especies de mamíferos, entre los que destaca la nutria.

"España cuenta con más de 1.300 embalses y apenas quedan ríos sin fragmentar. Los políticos tienen la responsabilidad de conservar los ríos que quedan en estado natural", concluye Adena.