La Plataforma Vecinal Aldea Moret, que se opone frontalmente a la instalación del ecoparque en la finca los Millares y reclama a las administraciones responsables que elijan otra lugar para el mismo, ha exigido que se abra un debate ciudadano sobre la ubicación de esta infraestructura para pulsar la opinión de la ciudadanía y advierte de que si no se inicia este diálogo emprenderán "las oportunas medidas de choque para impedir la ejecución del proyecto".

Las primeras acciones de movilización comenzaron precisamente ayer, cuando miembros de la Coordinadora por la Libertad de Expresión se concentraron en el paseo de Cánovas para protestar contra la futura ordenanza de convivencia y aprovecharon para repartir octavillas en contra del ecoparque.

Los colectivos que forman la plataforma --las asociaciones de vecinos La Esperanza, Santa Bárbara, Unión Española de Explosivos, la parroquia de San eugenio, la Asociación Socio-Cultural Aldea Moret, el club deportivo de Cazadores y el centro cultural y de yoga Norba Caesarina--, así como la asociación vecinal de Santa Bárbara y los 21 propietarios de la finca los Millares se oponen a la instalación del ecoparque porque creen que es un "basurero" y que genera problemas de malos olores y la dispersión de plásticos es "notable" en un radio de varios kilómetros.

Los afectados afirman que la ubicación decidida para el ecoparque no sólo perjudica a Aldea Moret, sino también a Malpartida y a la propia capital cacereña, por lo que instan a que se desestime este emplazamiento.

Los colectivos instan a las autoridades a "cambiar la forma de hacer las cosas", pues consideran que un proyecto de "esta magnitud" requiere un estudio de impacto ambiental, con alternativas, y un periodo de información pública. Asimismo, defienden que es "necesario" modificar el concepto que se tiene de los ecoparques "para que se conviertan en plantas de reciclaje y compostaje".