La obra del aparcamiento subterráneo de Primo de Rivera entra la próxima semana en su fase definitiva. A las 7.30 horas del lunes la avenida quedará cortada al tráfico, para iniciar en los días sucesivos la excavación de 15 metros de profundidad que albergará el nuevo aparcamiento subterráneo, con tres plantas y 351 plazas tanto de venta como de rotación. El corte de esta céntrica calle llevará aparejado alteraciones en el tráfico y los servicios públicos en los que han trabajado conjuntamente técnicos municipales y de la empresa que ejecuta el proyecto, Riosa Herce, "para que los servicios se vean alterados lo menos posible", explicó ayer el concejal de Fomento, Víctor Bazo, que explicó los cambios que afectarán a la zona en los próximos días. Le acompañaron el portavoz, Rafael Mateos, el gerente de Riosa, Javier Ovalle y técnicos municipales de distintos servicios.

PARON ESCOLAR Los trabajos comenzarán el lunes "aprovechando el parón escolar, las vacaciones estivales y la reducción de la circulación y las posibles molestias a los ciudadanos", señaló Bazo. Las obras se ejecutarán durante once meses, pero la previsión es que el corte al tráfico de la calle no se prolongue más de ocho, el plazo máximo que se da la empresa. "Si se pudiese reducir algo ese plazo, lo vamos a hacer, pero preferimos ser conservadores", afirmó Javier Ovalle.

La primera consecuencia de la restricción del tráfico en la zona es que los vehículos procedentes de Hernán Cortés se canalizarán ahora de forma exclusiva por Virgen de Guadalupe. Ante el incremento del tráfico que se prevé en esta vía, se han previsto una serie de modificaciones para agilizarlo en la medida de lo posible. La primera de ellas es que se suprimirán 86 aparcamientos para que toda la calle tenga doble carril en ambos sentidos. El doble carril solo existe ahora en el tramo entre la calle Viena y Hernán Cortés. Lo que se va a hacer es suprimir los aparcamientos de la mediana del tramo de Virgen de Guadalupe, entre Viena y Ruta de la Plata, con el fin de ganar un carril a incluso espacio para un aparcamiento de motos en algún tramo. Bazo recordó que la supresión de aparcamientos ya se contemplaba en el Pimus y que era la única alternativa para evitar que se talaran las acacias que aún existen en ese tramo de la calle.

La regulación semafórica se cambiará en la zona para conseguir en Virgen de Guadalupe la onda verde, con el fin de que los coches que circulen a 40 kilómetros por hora, puedan cruzar en verde todos los semáforos entre Hernán Cortés y Gil Cordero y agilizar así más la circulación.

Durante la obra se mantendrá el paso de peatones por Primo de Rivera y también el acceso a los dos garajes privados que hay en la calle; además se habilitarán dos nuevos aparcamientos de carga y descarga para el servicio de Correos y cuatro aparcamientos para el servicio Múltiples, todos ellos en la avenida de España. La parada de taxis de Primo de Rivera se trasladará a la esquina de Virgen de Guadalupe (junto al antiguo local de Galerías Madrid) y se alterará el recorrido de nueve líneas de autobús: las líneas 1, 2, 3, 5, 7, 8, 40, Campus y Refuerzo, por la supresión de las dos paradas a ambos lados de la calle.

LA SEGURIDAD Lo primero que se hará tras el corte al tráfico de la calle será retirar el mobiliario urbano que hay (farolas, señales...) y árboles, y se iniciará la retirada del pavimento. A continuación comenzará la excavación. Inicialmente se bajará solo hasta un metro de profundidad y desde ahí se llevará a cabo el pilotaje en todo el perímetro del futuro párking, trabajos que se prolongarán sobre un mes y que conformarán la