No hay más opciones. El ayuntamiento tendrá que buscar un terreno municipal con un uso adecuado para poder construir una nueva perrera. Así lo anunció ayer a este diario la concejala responsable de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro, tras varios días de continuas reuniones con la Junta de Extremadura y con distintas secciones municipales para buscar alternativas. El problema estriba en que la actual perrera, situada junto al campus universitario cacereño, no tiene licencia para su actual uso, y esta importante carencia ha salido a la luz hace solo unos meses, justo después de que se reformara el recinto a principios de año, una obra en la que se han invertido en torno a 40.000 euros.

De hecho, el ayuntamiento tendrá que disponer de otros 400.000 euros para edificar el nuevo recinto. Según Marcelina Elviro, ésa es la cantidad que ha calculado el concejal responsable de Economía, Hacienda y Patrimonio, Lorenzo de la Calle, en los distintos encuentros mantenidos estos días. "Tenemos la intención de agilizarlo todo para solventar el problema lo antes posible, porque en la perrera actual no podemos continuar por más tiempo, es ilegal. Ya buscamos terrenos municipales factibles", reiteró la concejala.

ZONA ZEPA Las prisas están más que justificadas. Desde que hace unos meses se supo que la perrera, situada en Zona de Especial Protección de Aves (Zepa) y en suelo docente de la universidad, no tiene ninguna licencia para su utilización como centro zoosanitario, cualquier actuación que el ayuntamiento realice en ella, por ejemplo la firma de una simple subvención, puede ser constitutiva incluso de un delito. Lo curioso es que la instalación lleva dedicada a este uso aproximadamente dos décadas, y desde hace ocho años la protectora cuida en su interior a una media de ochenta perros.

"Nos hemos topado con una situación complicada y estamos haciendo todo lo posible por subsanarla del mejor modo y con rapidez", declaró Marcelina Elviro, muy molesta por las declaraciones de la exconcejala de Asuntos Sociales, Basilia Pizarro, del PP, quien ayer le acusó de "irresponsable" por el retraso en el pago de subvenciones a la protectora, que se encarga de la perrera, y por criticar el convenio que en su día aprobó el PP para la gestión de este recinto.

"RESPUESTA AL PP" "Yo no sé ni como Basilia Pizarro me acusa de irresponsable, cuando estoy solucionando un problema que dejó ella --declaró Marcelina Elviro--. Ese convenio es claramente un churro , todo el mundo lo entiende así y ella lo sabe. Que critique lo que tenga que criticar, pero en este caso debería mostrarse más discreta. Ha intentado arreglar un asunto creando otro más grave, que ahora tenemos que solventar nosotros", agregó.

La concejala de Asuntos Sociales también tiene previsto reunirse en los próximos días con las responsables de la protectora cacereña para tratar este asunto y para que el recinto siga funcionando del mejor modo hasta el traslado. La edil no quiso pronunciarse ayer sobre si la futura gestión de la perrera será por convenio o por concurso. "Ahora tenemos que centrarnos en encontrar el terreno conveniente y realizar la obra", matizó