El próximo incremento de la cuota variable que se abona por el agua consumida en domicilios será de un 6%, una subida que es consecuencia de la revisión anual de precios del contrato entre el consistorio y Canal de Isabel II, la empresa que gestiona el suministro y la depuración de agua. Las actualizaciones que se producen en el contrato afectan a la tasa que abona el usuario. Si en la última subida, que también fue de un 6% y que entró en vigor hace un año, incidió el coste de la reforma de la red para terminar con el suministro del Calerizo, en la próxima repercutirá el descenso producido en el consumo de agua. Se da la circunstancia de que a menor gasto, más cara sale el agua, ya que debe mantenerse el equilibrio financiero de la concesión.

El pasado año se consumieron 7.075.706 metros cúbicos, casi 225.000 menos que en el 2001. Un resultado que se presentó ayer ante la comisión de Hacienda y que no convenció a la oposición, que votó en contra de la revisión de precios del contrato, que se aprobó con el apoyo de los concejales del equipo de gobierno. El portavoz de IU, Víctor Casco, consideró ilógico que el consumo haya descendido a niveles de hace un lustro y criticó el "servicio deficitario" que se presta.

El concejal socialista Lorenzo de la Calle demandó que "se verifique que ha sido verdad el descenso en el consumo" de agua y denunció "la falta de control" de los contratos de gestión de servicios públicos. El edil calificó de "leoninas" las condiciones de la concesión de la gestión del agua.

LA REVISION DEL CONTRATO

El concejal de Hacienda, Felipe Vela, comentó que ayer se reunió con el gerente de Canal de Isabel II porque "se tienen que analizar las causas" que inciden en el descenso del consumo, "una bajada que me preocupa", añadió. Vela aseguró que convocará a la comisión de seguimiento de las contrataciones y afirmó, ante las críticas del grupo socialista, que en la mesa de contratación "todo se lleva con transparencia".

El descenso en el consumo de agua no ha sido el único factor que ha influido en la revisión de precios del contrato con Canal de Isabel II, ya que esta actualización también está afectada por la aplicación del IPC del año 2002 a los gastos de personal, mantenimiento, y energía; por la amortización de obras, entre las que figura la del Calerizo; o por la utilización del trasvase, que en el 2002 funcionó casi todo el año.