Será un recinto acristalado, rodeado de zonas verdes, moderno, acogedor y lo más parecido posible a un hogar familiar. El nuevo centro de menores ya ha comenzado a construirse con un presupuesto de 2,2 millones de euros financiados por la Consejería de Bienestar Social, sobre una parcela municipal de 5.000 metros cuadrados situada en Nuevo Cáceres, justo en la confluencia de la Ronda de la Pizarra y la calle Juan Solano Pedrero. Las actuaciones se iniciaron en octubre con un plazo de ejecución de 18 meses, según la información facilitada por la Junta, de modo que previsiblemente estará en marcha en el 2010.

Este centro sustituirá al Julián Murillo, situado en la ronda de San Francisco y propiedad de la diputación, que ha funcionado durante largos años como orfanato cacereño. Pero el nuevo recinto será lo más alejado posible de este concepto. De hecho, más de la mitad de la superficie, casi 3.000 metros cuadrados, corresponderán a espacios libres y ajardinados, y el área residencial se dividirá en módulos con dormitorios, salón, cocina y baños a semejanza de una vivienda familiar, según el proyecto diseñado por el arquitecto cacereño Eleuterio Sánchez Vaca, ganador del concurso convocado por la Junta.

JUEGOS, TALLERES... Gestionado directamente por la Consejería de Bienestar Social, el centro dispondrá de 40 plazas para niños de 0 a 6 años que carecen de familia o no pueden permanecer con ella por distintas circunstancias. Los pequeños de hasta 1 año tendrán módulos distintos con habitaciones de cuna, sala de biberones y estar, aseos y una estancia de guardia. El edificio también dispondrá de una zona común con área de juegos y gateo, talleres de audiovisuales, gimnasio, biblioteca, área administrativa, salas de visita, instalaciones para los docentes y zona de aparcamiento.