La Policía Nacional tratará de resolver los problemas de inseguridad ciudadana que padecen cada una de las barriadas de Cáceres. Para ello, el casi recién llegado --hace 5 meses-- comisario jefe de la Cuerpo Nacional de Policía, José María Villar del Saz, ha abierto una ronda de reuniones con cada uno de los presidentes vecinales para examinar uno a uno los puntos negros de cada distrito. "Intentaremos dar respuesta a los problemas en la medida de lo posible y con los medios que tenemos", declaró Villar a este diario.

Hasta el momento, el comisario ha recibido a los representantes vecinales de La Madrila y Nuevo Cáceres y al de los empresarios del polígono industrial de las Capellanías. En las próximas semanas, se continuarán los contactos con el resto de dirigentes. La intención es "conocer los puntos negros en materia de seguridad que tienen detectados los vecinos" y "establecer cauces fluidos entre la policía y los ciudadanos para trabajar conjuntamente", justificó Villar del Saz.

Por ejemplo, el presidente de La Madrila y de la federación vecinal, Miguel Salazar, trasladó la problemática derivada de la movida que sufre el barrio, por el exceso de ruido y la falta de respeto del horario de cierre de los bares, según explicó Salazar.

VENTA DE DROGA También le puso en conocimiento de la detección por parte de algunos vecinos de "unos dos o tres" puntos de venta de droga en la barriada vinculados a algunos negocios de hostelería. En La Madrila se han desarticulado en los últimos años varios de estos negocios clandestinos.

Asimismo, el presidente de la asociación de Nuevo Cáceres, José María Tovar, informó al comisario de la necesidad de estrechar la vigilancia en dos zonas concretas de la barriada: el parque situado en las traseras de la estación de autobuses y las traseras igualmente del edificio del ateneo, "donde hemos observado movimientos raros y presencia de personas sospechosas".

Aún así, Tovar cree que la vigilancia y presencia policial en el barrio es "aceptable". "Nosotros vemos patrullar tanto a la Policía Nacional como a la local", dijo. Al mismo tiempo, expresó su apoyo al comisario para reivindicar la nueva comisaría que se prevé construir en el barrio y que el comisario anunció, en declaraciones a este diario, que se espera que el Gobierno incluya en los presupuestos del 2008.

La idea es "trabajar los problemas con cada asociación", detalló el comisario. Cuando terminen los contactos, se prevé elaborar un estudio de la situación de toda la ciudad.