Las negociaciones que lleva a cabo el ayuntamiento para adquirir el archivo del fotógrafo cacereño Juan Ramón Marchena, fallecido en febrero del 2001, están a punto de fructificar después de casi dos años y se espera que puedan cerrarse en septiembre. Estos fondos, compuestos por casi 5.000 fotografías, 2.000 libros y otras curiosidades, están actualmente en manos de la familia Marchena, que siempre ha manifestado su disposición a cederlos a la ciudad de Cáceres.

Tanto la concejala de Cultura, Cristina Leirachá, de la que dependen directamente estas negociaciones, como el portavoz de la familia, Enrique Harto, confirmaron el cercano acuerdo que están a punto de alcanzar las dos partes y que confían se materialice en septiembre, puesto que la concejalía pretende incluir el coste de la adquisición en los presupuestos municipales del 2006.

EL COSTE La cifra que pagará el ayuntamiento por este archivo es, de momento, una incógnita. Ninguna de las partes han querido adelantar la cuantía que se está barajando hasta que esté cerrado el acuerdo. Una cifra que, en principio, sería inferior a los 180.000 euros (20 millones de pesetas). El ayuntamiento encargó dos tasaciones de la colección a especialistas, sobre todo de 600 libros de toda la biblioteca de Marchena en los que está interesado y las fotos, cuyo valor aún no se ha cuantificado.

Enrique Harto asegura que el dinero "no será un impedimento para que el consistorio se quede con los fondos", puesto que la única preocupación de la familia Marchena, según declaró, son las condiciones técnicas de conservación, exposición y acceso público al mismo. "La familia siempre ha querido que sea el ayuntamiento el que se quede con él, aunque en unas condiciones adecuadas", declaró.

De hecho, la familia ha recibido otras ofertas de compra, tanto institucionales --de la diputación y la Junta de Extremadura--, como privadas. Una empresa dedicada a la compra-venta de este tipo de colecciones hizo una propuesta de compra por 300.000 euros, según Harto, aunque éste confirmó que no será, "ni mucho menos", la cantidad que se pedirá al ayuntamiento.

EXPOSICION PERMANENTE La concejalía de Cultura entregó en julio un informe a la familia con todas las condiciones de la operación y, aunque aún habrá que ultimar algunos detalles, éstas parecen satisfacer a los herederos del fotógrafo.

Entre esas condiciones figura la exposición de los fondos al público. La intención del ayuntamiento es hacer una selección de las mejores fotos y dedicar una de las salas del Museo Municipal como exposición permanente. El resto se guardaría en el Archivo Municipal (palacio de la Isla) y se digitalizaría.