No es una peatonalización completa, ni un cierre al paso de todos los coches. Se trata de restringir, que sólo circulen los autorizados. Ahora toca realizar en la plaza lo hecho en la parte antigua, donde con pivotes y cámaras se ha limitado la circulación. La intención del concejal de Tráfico, Santos Parra, es que a corto plazo agentes de policía se coloquen en los accesos a la plaza para restringir la circulación. A medio plazo se quiere instalar el sistema de cámaras y pivotes.

Este planteamiento se llevó a la última comisión local de Tráfico, en la que se habló de empezar la próxima semana, aunque como muy pronto "no va a ser hasta dentro de unos diez días" y siempre antes de final de año, matizó Parra, que explicó que "de momento" estarán los agentes en una actuación previa y "experimental" a la solución definitiva de los pivotes, cuya instalación está pendiente de "su inclusión en los presupuestos del 2004".

UNA ACTUACION EXPERIMENTAL

Parra comentó que los vehículos de residentes, taxistas, servicios públicos y carga y descarga, esta última hasta las once de la mañana, circularán por la plaza, y que con la presencia de los agentes de policía se pretende comprobar qué resultados y aceptación tiene esta medida "antes de que con los pivotes sea ya tajante", precisó el concejal. La intervención en la plaza se suma a la realizada en Roso de Luna y a las proyectadas en Ríos Verdes y en la plaza de la Concepción, que "crearán un cinturón" en el centro con el tráfico restringido. Ahora sólo hay un pivote en el acceso a la plaza Mayor por la calle General Ezponda, aunque "es manual y requeriría de una presencia continua de la Policía Local", añadió Parra.

En cuanto a los aparcamientos en la zona, el edil recordó que está el párking de Obispo Galarza, que tiene una ocupación media del 20%, y que hay otros en proyecto, como el del patio del convento de Santa Clara.