La concejala de Cultura, Cristina Leirachá, evaluó ayer de forma "muy positiva" el VII Festival de Música Antigua que se celebró la semana pasada en el caso histórico de la capital cacereña, y aseguró que ha cumplido su objetivo de ofrecer un gran espectáculo a un público muy selectivo.

Leirachá subrayó el hecho de que el festival está dirigido a un público muy concreto, lo que explica la escasa afluencia de espectadores --120, 96 y 194, respectivamente, en los tres días de concierto--. "Pero ese escaso público entiende y valora la gran calidad que ofrecieron los artistas", remarcó.

La concejala destacó las audiciones del piano forte, salterio y guitarra barroca.

Por último, dijo que se estudiará de cara al año próximo adelantar la cita a la primera semana de septiembre para gozar de mejor clima que en la presente edición.