Durante doce años Francisco José P. R., ha ejercido la violencia de manera habitual sobre su mujer.

Por este delito la Audiencia Provincial le ha condenado a dos años de prisión y le prohíbe acercarse a la víctima a una distancia inferior a 300 metros.

En el juicio quedó probado que durante todo el tiempo que duró la relación la mujer tuvo que soportar continuamente insultos y vejaciones que se acentuaron cuando la víctima se negó a mantener relaciones sexuales con el condenado lo que motivó a que se decidiera a poner la denuncia que llevó al juicio.