El trasvase del Almonte al Guadiloba volverá a activarse esta semana, posiblemente a partir del miércoles. Esta conducción estará de nuevo operativa después de veinte meses. Según indicaron ayer fuentes de Canal de Isabel II, la compañía que gestiona el servicio del agua, el trasvase dejó de funcionar el 28 de enero del 2010.

La puesta en marcha de este trasvase incide en el precio que el ayuntamiento tiene que pagar por cada metro cúbico que se trata para abastecer a Cáceres. La causa es el incremento que se ha producido en los últimos años en el coste energético, que para la traída de agua desde el Almonte, en la cola del pantano de Alcántara, hasta el pantano del Guadiloba está en unos cien mil euros al mes, casi unos 3.500 euros por cada día.

El trasvase se reactiva con el Guadiloba al 50% de su capacidad. Este trasvase, que se construyó como una solución provisional en el año 1992, garantiza que el Guadiloba tenga agua suficiente para la ciudad.

La solución definitiva para el abastecimiento a Cáceres será la conducción desde el embalse de Portaje, aunque su finalización no está prevista hasta 2012 y está pendiente de que se ejecute el tramo de la nueva red que cruzará los ríos Almonte y Tajo.

EL CAMBIO DE CONCESION La entrada en funcionamiento del trasvase coincide con el debate sobre el incremento de las tasas de agua y de alcantarillado, que se inicia mañana miércoles en la comisión de Economía y Hacienda. El cambio en la concesión del servicio incide en este incremento de las tasas, al igual que el hecho de que la tarifa del agua no se ha modificado desde el tercer bimestre del año 2005 y por tanto no se recogen las revisiones de precios del contrato entre la actual concesionaria, Canal de Isabel II, y el ayuntamiento, así no se está repercutiendo en la tasa el aumento que se ha producido en el coste energético.

La nueva concesión del servicio, en la que Acciona va a sustituir a Canal, repercute en la tasa porque con el nuevo contrato se introducen costes como inversiones para mejorar la red o el canon de 37,7 millones que Acciona dará al ayuntamiento en dos plazos (30,2 y 7,5). La empresa adelanta tanto los importes de la inversión como el canon y el ayuntamiento se los tiene que devolver en los 24 años que dura la concesión (del canon solo se devuelve el primer plazo).

El servicio se paga con la tasa, motivo por el que ahora se afronta su revisión. En cuanto a la incidencia del canon, el PP, ahora en el gobierno, se opuso en la pasada legislatura, cuando estaba en la oposición, a ligarlo a la nueva concesión, por lo que responsabiliza de su incidencia en la tasa al PSOE, que gobernaba en la pasada legislatura y que a su vez responsabiliza al PP de tener que haber metido el canon para pagar las deudas que el PP dejó cuando gobernó antes de 2007.