LUGAR DE NACIMIENTO CACERES

AÑO 1972

ESTUDIOS MAGISTERIO

ACTIVIDAD DIRIGE LA TIENDA DE COMIC ´PLAN B´ EN CACERES Y HA PUBLICADO TRES TITULOS, ADEMAS DE COLABORACIONES EN PRENSA. TAMBIEN HA PRODUCIDO CORTOS DE DIBUJOS ANIMADOS.

Los clientes se sucedían ayer en la tienda de cómics Plan B, una rara avis cultural en Cáceres. Abrió hace casi 4 años y llevaba cinco días cerrada. Fermín Solís, su responsable, había viajado a Barcelona con ciertas expectativas después de ser candidato a los premios que concede el Salón del Cómic de esta ciudad, la cita de referencia en España de un género aún discutido, pero siempre emergente. El fin de semana, Solís logró el premio al Autor Revelación por su corta trayectoria, en que ha publicado tres títulos. "Estos premios son como los Goya para el cine", afirma el dibujante de cómic, que ocasionalmente probó fortuna, y con éxito, en el cine de dibujos animados. "Pero lo he dejado porque requiere mucho tiempo y dependes de otras personas".

No obstante, su inquietud por experimentar (ha ilustrado portadas de libros y relatos) le hace concebir una novela en la que las ilustraciones sean tan relevantes como el texto. Ahora confía en que la repercusión de este reconocimiento nacional le provea de encargos. Hace unas semanas publicó en la última página de El País de las Tentaciones.

--Su estilo ha cambiado desde que comenzó a dibujar.

--Sí, me gusta cambiar. Yo había hecho un cómic melancólico, basado en el cine del director Eric Rhomer y en el de Win Wenders. Y ahora me he acercado más al costumbrismo, a la vida cotidiana, a los problemas de vivir en casa de los padres con 30 años, o de sufrir el paro. Es necesario el cambio, porque de otra manera uno se estanca. Pero aunque uno cambie, la forma de dibujar se mantiene.

--¿Como definiría su dibujo?

--Reúne el trazo limpio de autores como Hergé o los dibujantes franceses con algunas de las aportaciones de los autores independientes de Estados Unidos.

--Ha publicado tres cómics.

--Sí. En Los días más largos , cuento mis recuerdos infantiles. Ahora estoy preparando una versión más amplia que me ha pedido una editorial. En No te quiero, pero... , reúne, con tono de comedia, a una serie de amigos y retrato sus problemas. Y en De ballenas y pulgas , inspirada en la obra del director de cine Jacques Tati, concibo dos historias: sobre un hombre en una ciudad deshumanizada al que le cambia la vida cuando entra en un club de coleccionistas de objetos raros, y sobre otro personaje que deniega la autorización de instalación de una fábrica en el pueblo que visita.

--¿Qué le parecen las numerosas adaptaciones que se han hecho del cómic al cine?

--En general, casi nunca cubren las expectativas; y la mayoría son de cómics de superhéroes que llevan dibujándose hace más de sesenta años. Entonces uno tiene ya sus ideas hechas sobre cómo son y le insatisface cuando los ve en el cine. Me interesan la adaptación que se ha hecho de X-Men , porque trata a los personajes desde un punto de vista sicológico, o las versiones de Kevin Smith: en sus películas se respira el espíritu del cómic.

--¿Hacia dónde se orienta este género?

--Están surgiendo obras de gran nivel literario, de autores como Spiegelman, Alan Mores y Eddie Campbell, que salen del círculo de librerías especializadas y se venden bien. Ya no se ve tanto el cómic como algo underground . Es como el cine o la literatura: hay cosas buenas y cosas malas.