Por primera vez en esta legislatura el portavoz del equipo de gobierno, Rafael Mateos, perdió el tono conciliador al que acostumbra para dar paso a su cara más bronca. Sorprendieron las formas del pacífico Mateos que ayer definió como «lamentable» que ninguno de los ocho concejales del PSOE asistiera el pasado jueves al homenaje que se le rindió al concejal del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco al cumplirse el 20 aniversario de su asesinato a manos de la banda terrorista ETA.

El portavoz exigió incluso a los socialistas que dieran explicaciones públicas por su ausencia en el acto que tuvo lugar en el parque Puerta Sur del barrio de Nuevo Cáceres, donde existe desde 2010 un monolito en recuerdo a las víctimas del terrorismo.

Mateos consideró que se trataba de un acto de «claro y rotundo» rechazo a ETA y un apoyo a las víctimas. El portavoz no dudó incluso en acusar a la formación de Luis Salaya de estar «coqueteando con la ambigüedad». Y fue más allá al afear a Salaya su ausencia teniendo en cuenta, dijo, que el portavoz del Grupo Municipal Socialista cuenta con una media liberación. «No tiene excusas, porque tampoco tenía que estar a esa hora en la Comisión de Urbanismo». Por contra, Mateos ensalzó la presencia de Ciudadanos y que Cáceres Tú se excusara: «uno de sus concejales estaba en comisión y la otra, trabajando», matizó sobre Podemos.

Las declaraciones de Mateos enfurecieron a los socialistas, que explicaron que no pudieron asistir por «circunstancias relacionadas con la actividad municipal y laboral», pero que eso no significa que no estén comprometidos con las víctimas, como «ha querido hacer ver» el portavoz del Gobierno. El PSOE no tuvo reparos en calificar de «inmoral y repugnante» la actitud Mateos, quien, a su juicio, ha intentado «levantar dudas» sobre el compromiso de los socialistas con las víctimas del terrorismo. Es, insistió, «una actitud inmoral y ruin del portavoz popular y se enmarca dentro del intento del PP a nivel nacional por rentabilizar el dolor de las víctimas, un asunto muy doloroso para la sociedad española», concluyó.