Más demora. La sede de la asociación de vecinos Hispanoamérica finalmente no se inaugurará hasta después de verano, según informó ayer a este diario el concejal de Urbanismo, Víctor Bazo. El motivo es que el trámite de la resolución del contrato con la empresa que acometía las obras y dejó la parte eléctrica por efectuar tras entrar en concurso de acreedores, Iniciativas para la Construcción y Obra Civil (Incoc), se demorará unos tres meses. El ayuntamiento envió, a primeros de mayo, la documentación correspondiente a la Junta de Extremadura en la que el equipo de gobierno local reclama, en la resolución del contrato, la devolución de la fianza con la que finalizar la parte que resta de la obra: la eléctrica. Luego se volvería a acometer la parte de jardinería, ya que los trabajos que se hicieron no han contado con mantenimiento. «La idea es tener todo liquidado en septiembre, para hacer la cesión a la asociación y que los vecinos puedan comenzar a hacer sus actividades», remarcó Bazo, que explicó que la fianza no se puede devolver a la empresa porque la obra no esta finalizada. «No teníamos la garantía porque la obra no estaba recepcionada. Como ayuntamiento teníamos que dar los pasos procedentes y comprobar que esta empresa está al corriente con Hacienda», sostuvo.