A falta del último trámite del pleno del 21 de mayo, lo cierto es que ayer Cáceres se reconcilió con la música en directo después de que la Comisión de Seguridad Ciudadana diera el definitivo, por unanimidad de todos los grupos de la corporación, a la nueva ordenanza de ocio, que regulará el funcionamiento de los locales de copas y tratará de limar la siempre difícil convivencia entre la movida y el derecho al descanso de los vecinos.

La normativa permitirá, en palabras del concejal Carlos Jurado, que "Cáceres se adapte a los estándares" del ocio nocturno, que haya música en directo, que existan cafés concierto siempre y cuando cumplan determinados preceptos (metros cuadrados, medidas de insonorización y seguridad...), pero además la ley dotará de marco jurídico a muchos empresarios cacereños, que a partir de ahora tendrán un camino legal muy claro para hacer realidad sus proyectos.

La ley tampoco se olvida de los vecinos, a quienes ampara, y pone coto a quienes encubriéndose en un hasta ahora vacío legal reabrían sus locales de madrugada cometiendo un auténtico fraude de ley. "Por fin el ayuntamiento dispondrá de una herramienta para regular los ruidos y conciliar el ocio con el descanso vecinal y el derecho al trabajo de los propietarios de los locales", enfatizó Carlos Jurado.

Pero, además, la ordenanza garantiza el desarrollo del proyecto Intramuros, en su fase de reapertura de locales y negocios de, entre otras, las calles Moret, Paneras, General Ezponda o la plaza de la Concepción. La comisión terminó ayer de estudiar las más de 100 alegaciones divididas en 11 bloques que se presentaron al borrador de la ley. Una de ellas era precisamente la referida a establecer una zona de especial actuación que englobara a las calles prioritarias para la revitalización funcional de los locales --desde taperías hasta restaurantes de alto nivel--, como planteó en noviembre pasado el concejal de Foro Ciudadano, Felipe Vela, mentor de Intramuros.

El concejal de FC calificó de "muy importante" el acuerdo de ayer y recordó que gracias a su aprobación esa zona quedará fuera de la calificación de zona saturada, exenta de cumplir la distancia mínima de 50 metros que se establece entre los locales para su apertura. Con ello, se da un paso fundamental para avanzar en los trabajos de Intramuros que permitirán la apertura de nuevos negocios de hostelería, comercio y otros sectores, y dinamizarán la plaza Mayor y su entorno.

El edil de Seguridad Ciudadana recalcó, en relación a esta alegación, que la excepción de zona saturada se aplica al proyecto Intramuros de una forma concreta y solo a los locales que integran dicha iniciativa. "Se aplica para determinado tipo de locales y en ente momento ninguno de copas", aclaró Jurado.