La campaña que para controlar el uso del móvil al volante se realiza estos días en la ciudad ha sorprendido a todos, pero de forma especial a José María Sánchez Tello. "Me han puesto una multa de 90 euros por usar el móvil y resulta que yo no tengo móvil, nunca lo he tenido", asegura indignado este empresario cacereño, copropietario de Armarios Neves.

Todo ocurrió, recuerda para este diario, el pasado miércoles sobre las seis y media de la tarde. Circulaba por la avenida de España cuando, ya llegando a la calle San Antón, "dos policías me pararon y me dijeron que estaba multado por usar el móvil. Yo les dije que era imposible, que yo no tengo móvil y, aunque les pedí que me registraran a mí y al vehículo para comprobarlo, no me creyeron y me indicaron que fuera a la jefatura".

José María Sánchez así lo hizo, pero la respuesta en la Jefatura de la Policía Local fue la misma. "El oficial de guardia tampoco me creyó, y la solución que me dio fue que hiciera un pliego de descargo".

Aunque así lo hizo, José María está convencido de que no le va a servir de nada y que tendrá que pagar la multa, una injusticia ante la que se siente impotente, "pues no sé como demostrar que no tengo móvil, por lo que lógicamente no podía ir hablando por él mientras conducía, y que la multa es improcedente".